Suecia reconoce que las albóndigas, su plato nacional, en realidad son turcas
Es como si los responsables de Marca España reconocieran que la tortilla de patatas, por decir algo, se inventó en Bélgica
Albóndigas con salsa de arándanos y puré de patatas. / GETTY
Madrid
Los nacionalismos tienen defensores y detractores, pero pocos generan tantas pasiones como los nacionalismos gastronómicos. Por eso resulta especialmente llamativo que, en un tuit que le honra, Suecia haya reconocido oficialmente que las albóndigas —su plato nacional— en realidad son de origen turco.
Tal y como cuenta el diario británico The Guardian, el reconocimiento se produjo en Twitter el pasado 28 de abril. El mensaje de la cuenta oficial de Suecia (@swedense) no dejaba lugar a dudas: "Realmente las albóndigas suecas están basadas en una receta que el rey Carlos XII se trajo a casa de Turquía a principios del siglo XVIII. ¡Atengámonos a los hechos!".
Las reacciones no se han hecho esperar. El canal internacional de noticias TRT World ha destacado que "las albóngidas que te comes en IKEA son turcas, en realidad". Y Anadolu, la agencia turca de noticias, ha corroborado la historia con la investigadora Annie Mattson, del Departamento de Literatura de la Uppsala University (Suecia), quien asegura que, tras perder una guerra contra Rusia, el monarca volvió a casa con albóndigas, granos de café y rollitos de col.
Para dimensionarlo correctamente, el tuit difundido por Suecia podría compararse con un hipotético reconocimiento, por parte de Marca España, de que la tortilla de patatas es belga, como apuntan algunas teorías. O con el hecho de que, siguiendo las insinuaciones del chef Albert Raurich, los italianos se desprendiesen del invento del risotto. Y es que la lista de disputas geogastronómicas es muy larga, en realidad: la pasta, las arepas, las pupusas, el pisco sour...
