Puticlub
"Puticlub se introdujo en un par de diccionarios manuales a finales del siglo XX como una voz irónica, sin percibir dónde está la ironía, pero no llegó al diccionario oficial hasta 2014. Es una palabra mestiza que funde el inglés con el español y una palabra distinguida con otra vulgar. Un término eficaz, en todo caso, porque deja muy claro lo que se quiere nombrar"
Madrid
Se dice que la prostitución es el oficio más antiguo del mundo, afirmación que es la absurdidad más antigua de la historia, porque se supone que quienes lo frecuentaban algún oficio tendrían... Pero esta palabra, puticlub, está recién llegada al diccionario de la RAE. Se introdujo en un par de diccionarios manuales a finales del siglo XX como una voz irónica, sin percibir dónde está la ironía, pero no llegó al diccionario oficial hasta 2014. Es una palabra mestiza que funde el inglés con el español y una palabra distinguida con otra vulgar. Un término eficaz, en todo caso, porque deja muy claro lo que se quiere nombrar.
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Y lo que se quiere nombrar se ha nombrado de todas las maneras posibles. Las primeras registradas, mancebía y lupanar, que llegaron del latín, y burdel, que vino del catalán, esos lugares "habitados por mujeres perdidas", escribieron los primeros académicos. En 1925, llegó el prostíbulo al diccionario. Y desde entonces se han acuñado todo tipo de construcciones, desde las cultas "casa de lenocinio" o "casa pública", como si fuera un ayuntamiento, hasta la vulgar "casa de putas", pasando por los eufemísticos "club de alterne" o "club de carretera". Todo siempre en el ámbito de la ambigüedad, el mismo en el que habita esta actividad cuya regulación nunca acaba de llegar.
