Córdoba despide a José García Marín, pionero de la gastronomía cordobesa

Córdoba

“Se nos ha ido un maestro, un pionero”. Esta es una de las frases más repetidas hoy a las puertas de la Iglesia de San Nicolás de la Villa mientras, en su interior, cientos de personas se apretaban para escuchar la ceremonia religiosa que ha servido de despedida a José García Marín, fundador del restaurante El Caballo Rojo, fallecido ayer a los 91 años de edad.

Políticos de la actual Corporación municipal, como Emilio Aumente, Pedro García o José María Bellido, y otros de etapas anteriores, entre los que se encontraban Rosa Aguilar, Marcelino Ferrero o Ricardo Rojas, no han querido faltar a un funeral en el que también hemos visto a muchos empresarios que durante años han sido compañeros, pero también competencia, de José García Marín. Profesionales de la hostelería como Javier Campos, Miguel Cabezas, Alberto Rosales o Fran de la Torre, y cocineros jóvenes entre los que se encontraban Celia Jiménez y Antonio López.

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En el ambiente, un profundo sentimiento de respeto y reconocimiento hacia quien todos ellos consideran un pionero. En palabras del presidente de Hostetur, Fran de la Torre, García Marín fue “el primero que situó a Córdoba en el mapa cuando, realmente, la cocina cordobesa ni se conocía”.

“Cuando viajabas fuera, y decías que eras de Córdoba, te nombraban la Mezquita y el Caballo Rojo”, recordaba con cariño el cocinero Antonio López, del restaurante Tellus. “Para la gente joven, Pepe fue un ejemplo de constancia y buen hacer al frente en un restaurante en el que cada día que demostraba que amaba profundamente su profesión” ha dicho la cheff Celía Jiménez, que rememoraba con cariño su etapa en la cocina del Caballo Rojo como alumna de la Escuela de Hostelería.