"Lo más parecido al GTA que he visto": las redes alucinan con la persecución en la que pasa prácticamente todo

Madrid

Hace ya varios años, concretamente en marzo de 2014, el joven Ryan Stone era detenido por las autoridades estadounidenses en Denver (Colorado) después de protagonizar una persecución que pasaría a la historia por su parecido con las que se producen constantemente en videojuegos como Grand Theft Auto. Una persecución por la que posteriormente le caerían 160 años de prisión por una serie de hasta 14 delitos entre los que se encuentran algunos como intento de homicidio y asalto en primer grado a un oficial de policía.

A pesar de que ya han pasado siete años desde entonces, su historia vuelve a estar más presente que nunca. Todo ello gracias a las redes sociales, quienes han compartido de nuevo esta historia que comenzaba cuando Ryan Stone robaba un primer vehículo tras salir de una gasolinera en el que había un niño pequeño. Dado que el joven de 30 años estaba en situación de búsqueda por la policía como consecuencia de varios delitos de drogas que llevaba a sus espaldas, Stone decidió robar su primer coche para escapar del lugar de los hechos con rapidez. 

El prófugo llegó a robar hasta tres vehículos

Tras robar este primer vehículo, el joven inició una persecución que duró 45 minutos, cubrió 75 millas y se extendió por cinco condados diferentes. Así lo contaba el veterano periodista Jayson Luber para Denver 7 News, donde compartía un vídeo que pasaría posteriormente a la historia de Internet y de las redes sociales. En apenas dos minutos, el vídeo muestra algunos de los delitos que cometió Ryan Stone durante una persecución en la que llegó a robar dos coches más. 

En primer lugar, Ryan Stone conduce a toda la velocidad con el coche robado haciendo caso omiso a las señales de tráfico. De hecho, no tiene ningún problema en invadir el carril contrario a gran velocidad sin miedo a un posible accidente. Tanto es así que, llegado el momento, tampoco tiene reparo en saltarse los límites de la carretera y adentrarse en un camino de tierra para colarse rápidamente en la autopista para poder escapar con facilidad.

Condenado a 160 años por 14 delitos distintos

Dado que era consciente de que le estaban siguiendo, Stone paró a un segundo coche en medio de la carretera. Después de hacerse con el control de este segundo vehículo, el responsable del robo volvía a invadir el carril contrario de la autopista a gran velocidad mientras el resto de turismos hacían todo lo posible para evitarle. De hecho, el conductor llegó a sortear varias bandas punzante portátiles de la policía.

Únete al canal de WhatsApp de la SER

Una vez más, Ryan Stone volvía a bajarse del vehículo para robar un tercero. Después de conducir varias millas con el mismo, este acabó chochándose a gran velocidad contra otro coche en una intersección. La policía, que estaba en el lugar de los hechos, hizo todo lo posible para detenerle, pero el joven volvió a escapar (esta vez corriendo). Cuando los perdió de vista, el prófugo se quitó la sudadera para no llamar la atención. Sin embargo, era demasiado tarde. La policía acabó rodeando al joven, que no tuvo otra opción que tumbarse en el suelo para proceder a su detención. Un año más tarde, Stone sería condenado a 160 años de prisión.