Maurio Casals se desmarca de su relación con Planeta en el espionaje a los hermanos Dolset
El presidente del diario La Razón y consejero de Atresmedia ha declarado como imputado en la pieza 18 del macrosumario 'Tandem' por el presunto encargo de espionaje a Javier e Ignacio Pérez Dolset
Casals ha asegurado que es un mero asesor externo de Planeta sin capacidad para hacer ese encargo
El presidente del diario La Razón y consejero de Atresmedia ha declarado como imputado en la pieza 18 del macrosumario ‘Tandem’ por el presunto encargo del Grupo Planeta a Villarejo para espiar a los hermanos Javier e Ignacio Pérez Dolset. Una pieza que había sido archivada previamente por el juez Manuel García Castellón y la Sección Tercera de la Sala de lo Penal instó a retomar las diligencias y escuchar la declaración de Casal como presunto autor del encargo al comisario José Villarejo.
Según fuentes judiciales, Maurio Casals se ha desentendido del encargo, asegura que su relación con el Grupo Planeta es de mero asesor externo y no tiene capacidad para este tipo de contrataciones. Según Casals, conoció al ex comisario Villarejo en 2014 en una recepción de La Razón y ha negado cualquier conflicto con los empresarios.
A preguntas de la Fiscalía, Casals ha reconocido que habló con Villarejo sobre ambos empresarios pero que su relación con ellos era buena. Ni le debía favores a Villarejo, ha dicho, ni tenía relación con él. Tampoco le preguntó por los empresarios, si no que fue el ex comisario el que se refirió a ellos.
En caso de que alguien tuviera interés en perjudicar a los principales accionistas del Grupo Zed, que entonces contaban con una participación en el Grupo Planeta, en todo caso habrían sido el presidente de Planeta, José Crehueras; el ex consejero de legado José Manuel Lara; el consejero general Luis Elías y el jefe de Seguridad del Grupo, Antonio López, ha señalado según estas fuentes.
En esta pieza Casals está imputado por cohecho y revelación de secretos. La Sala entendió que si había elementos para atribuir a Casals la autoría del encargo a Villarejo, como apuntaba el auto de archivo de García Castellón, no había razón "para no continuar con la investigación".
Una vez reabierta la causa, los hermanos Dolset pidieron incorporar unas notas manuscritas de la agenda de Villarejo, donde aparecían anotaciones con parte de las gestiones de Villarejo para espiar a los empresarios, además de los audios incautados en el registro al excomisario en lso que hacía referencia a estos trabajos.