El bloqueo de Hungría y Polonia puede obligar a España a acudir al Mecanismo Europeo anticrisis
Se trata del peor escenario porque el MEDE sólo puede facilitar créditos, justo lo que España no quería
Rueda de prensa de tres comisarios europeos en la sede de la Comisión en Bruselas. / DPA vía Europa Press (DPA vía Europa Press)
Bruselas
Tener que recurrir al Mecanismo Europeo anticrisis (MEDE/ESM), como única solución a la espera que Polonia y Hungría retiren el bloqueo contra el Presupuesto plurianual europeo y los Fondos de Recuperación, es el peor escenario para España.
El peor escenario porque el MEDE solo puede facilitar créditos. Justo lo que España no quería porque el Gobierno planeaba comenzar el programa de ayudas con las subvenciones a fondo perdido, una opción dotada con 60.000 millones de los 140.000 atribuidos a España.
Más tiempo
Pero el tiempo corre. Fuentes de las negociaciones explican en privado a la Cadena SER que es posible un acuerdo con Hungría y Polonia, pero que ambos países necesitan más tiempo y mientras sus ministros lo malgastan en explicar que Europa los quiere "arrodillar", como ha afirmado Judit Varga, titular de Justicia del equipo de Orban, España e Italia se enfrentan a la terrible necesidad de las ayudas.
Pero lo que en julio parecía pactado, hoy está bloqueado y, aunque las mismas fuentes que defienden dar tiempo a los países del Este mantienen que el acuerdo es un compromiso al que la UE no puede renunciar, también añaden que ante la urgencia hay que ser inventivos.
Instrumento temporal
Y la invención pasa por recuperar el MEDE como instrumento temporal. Es decir, por aceptar de entrada lo que Holanda pedía desde el principio de esta partida: que los que necesitan el dinero vayan al Mecanismo pensado para facilitarles créditos.
El MEDE es sin embargo el símbolo de las políticas de austeridad europeas, el instrumento que coordinó el envío de los hombres de negro a los países intervenidos y bajo el control de la Comisión en la crisis bancaria.
Nadie lo ha utilizado
Por eso, nadie ha utilizado hasta hoy sus recursos aunque se abrió una línea de créditos de 240.000 millones para afrontar la primera fase de la crisis del Covid.
Italia hizo del tema condición básica. La solución contra esta pandemia no podía pasar por una institución que simboliza la intervención externa. Pero tras darle igual que a España la razón en la cumbre de julio, en la de hoy se pueden empezar a preparar las bases para que preventivamente se vaya al MEDE hasta que Polonia y Hungría quieran levantar el bloqueo.
Un pulso inadmisible para España e Italia cuyas voces empiezan a expresar, fuera de micro, que la Unión es un proyecto inútil si sus instituciones son incapaces de poder aplicar sus propias decisiones.
