El jurado del Premio Princesa de Asturias destaca el carácter transversal de las matemáticas en la ciencia
Meyer, Daubechies, Tao y Candés, distinguidos con el Premio Princesa de Asturias de Investigación
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Yves Meyer, Ingrid Daubechies, Terence Tao y Emmanuel Candès, Premio Princesa de Asturias de Investigación Científica y Técnica 2020. / ICMAT-UCLA
![Yves Meyer, Ingrid Daubechies, Terence Tao y Emmanuel Candès, Premio Princesa de Asturias de Investigación Científica y Técnica 2020.](https://cadenaser.com/resizer/v2/NMCJNB3STFOEHDIXPMLCMUWCTQ.jpg?auth=40188b26d1f8b14959d8a4998224df44faec9f2ff1992956636ce04f82e767ae)
Oviedo
El jurado del Premio Princesa de Asturias de Investigación Científica y Técnica 2020 concedido a los matemáticos Yves Meyer, Emmanuel Candès, Ingrid Daubechies y Terence Tao destaca sus aportaciones pioneras y la contribución social de esta disciplina y su trascendencia como elemento transversal de la ciencia.
El acta del tribunal, presidido por el científico español Pedro Miguel Echenique, califica de trascendental la aportación de las galardonados a las teorías y técnicas matemáticas para el procesamiento de datos, "que han ampliado extraordinariamente la capacidad de observación de nuestros sentidos y son base y soporte de la moderna era digital".
Así, incide en que Meyer y Daubechies han sido líderes en el desarrollo de la moderna teoría de las ondículas, "que son como latidos matemáticos que permiten desde asomarnos a Van Gogh y descubrir su estilo hasta escuchar la música que encierra el aparente ruido del Universo, entre otras muchas aplicaciones de todo tipo".
"En definitiva, visualizar lo que no podemos ver y escuchar lo que no podemos oír", añade.
Además, señala que la colaboración entre Tao y Candès y sus aportaciones en las técnicas de percepción comprimida, además de los innegables avances en imagen médica y otras pruebas diagnósticas derivadas de esta, "permiten completar las señales electromagnéticas o reconstruir melodías a las que el tiempo les robó notas".
El galardón, el séptimo en fallarse este año en el que la pandemia del coronavirus ha obligado a los jurados a celebrar sus reuniones de forma telemática, recayó el pasado año de manera conjunta en la estadounidense Joanne Chory y la argentina Sandra Myrna Díaz, especialistas en biología vegetal y estudiosas del impacto de la crisis climática.
En sus 39 ediciones anteriores el Premio de Investigación Científica y Técnica solo había recaído en tres matemáticos –Hamilton Smit (2001), Vinton Cerf (2002) y Luis Santaló (1983)– y había sido concedido, entre otros a las bioquímicas Emmanuelle Charpentier y Jennifer Doudna; los químicos Avelino Corma, Mark E. Davis y Galen D. Stucky; los físicos Peter Higgs y François Englert o los neurólogos Joseph Altman, Arturo Álvarez-Buylla y Giacomo Rizzolatti.
Los Premios Princesa de Asturias están dotados con 50.000 euros y la reproducción de una estatuilla diseñada por Joan Miró y su entrega está prevista para el próximo 16 de octubre en el Teatro Campoamor de Oviedo en una ceremonia presidida por los reyes de España.