La justicia reabre el 'caso espías' de Torrelodones contra el exalcalde popular Carlos Galbeño
La fiscalía pide tomar declaración como imputado al exedil, Carlos Galbeño, acusado de espiar a dos ediles de su partido que denunciaron casos de corrupción en el municipio madrileño
Fachada del Ayuntamiento de Torrelodones. / EFE
Madrid
El juzgado de Instrucción Nº2 de Collado Villalba ha ordenado la apertura de la causa que investiga quién está detrás de los seguimientos a dos concejales del PP que tras denunciar internamente varios casos de corrupción en el municipio madrileño, fueron espiados en el verano de 2006 y expulsados del partido meses después.
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Un caso que lleva años dando vueltas por los juzgados y que finalmente podría resolverse en el mismo donde se abrió la investigación en el año 2009. Galbeño llegó a estar investigado por esta causa en el año 2012 y fue archivada de manera provisional ya que la juez no encontró indicios suficientes para sostener que el exalcalde estaba detrás de los seguimientos.
Ahora, según el auto a fecha 27 de febrero, al que ha tenido acceso la Cadena SER, hay nuevos elementos que se han aportado a la causa y "que desvirtúan los motivos que determinaron el sobreseimiento provisional respecto a Carlos Galbeño", y por tanto "procede dejarlo sin efecto”.
El escrito recoge la petición del Ministerio Público para que se tome declaración a Carlos Galbeño en calidad de investigado y se practiquen nuevas diligencias para aclarar cómo se produjeron los espionajes a dos exconcejales y si estaban vinculados a las denuncias de corrupción que presuntamente motivaron el espionaje en el municipio. Entre las diligencias, la fiscalía pide la declaración en calidad de testigo de quien fuera la Jefa de Gabinete del alcalde, Esther Parra, y uno de los detectives que declararon durante la instrucción.
El PP y los promotores
Según fuentes cercanas a la investigación, los nuevos indicios apuntan a declaraciones que señalan a varios promotores de Torrelodones, beneficiarios de contratos públicos en el municipio, de ser quienes pagaron presuntamente la factura del encargo de espionaje del PP de Torrelodones, uno de los municipios con mayor renta per cápita de España.
El encargo lo habría llevado a cabo el entonces jefe de prensa del alcalde, Javier Quero, junto con el promotor José Luis Velasco. Ambos fueron al despacho de los detectives a pedir el trabajo por encargo del acalde y sufragado por dos promotores, Velasco y Manuel García Galbeño, sobrino del alcalde, según mantiene el denunciante, Jesús María Pacios, víctima del espionaje en 2006.
Jesús María Pacios y Reyes Tintó eran concejales de Juventud, Deportes y Educación, respectivamente, cuando en el junio de 2006 denunciaron casos de corrupción vinculados a Galbeño ante Francisco Granados, Cristina Cifuentes y otros altos cargos del partido. Lo hicieron internamente en la sede de Génova en varias reuniones en la primavera de 2006. En julio del mismo año ambos fueron espiados junto al notario del municipio, José María Benito, quién también se reunió con Esperanza Aguirre, expresidenta de la Comunidad de Madrid, para trasladarle las mismas denuncias de corrupción.
