La caída en picado el uso del carbón para generar electricidad ya afecta a empleos
La paralización de la central de As Pontes, en Galicia, afecta a cientos de transportistas. Han comenzado un recorrido desde Galicia a Madrid para mostrar su descontento al Gobierno central
Mayo y junio registran mínimos históricos en la quema de carbón en las centrales para generar electricidad. El carbón está más caro que el gas, es más contaminante y cada vez se utiliza menos
![](https://cadenaser.com/resizer/v2/Q4DLFVRQEZLDHODAK3YXMMOGAU.jpg?auth=5ab650647e147727fee805d1c35cdddd3452cee3c521d8b4845e71c920a75064&quality=70&width=650&height=271&smart=true)
Centra termica de As Pontes / Naturgy
![Centra termica de As Pontes](https://cadenaser.com/resizer/v2/Q4DLFVRQEZLDHODAK3YXMMOGAU.jpg?auth=5ab650647e147727fee805d1c35cdddd3452cee3c521d8b4845e71c920a75064)
Madrid
Cada vez se consume menos carbón: el gas lo está sustituyendo en la producción eléctrica. Mayo y junio registraron mínimos históricos, los valores más bajos desde que hay registros. Las centrales de carbón representaron en torno al 2% de toda la generación de electricidad.
La razón es que el carbón cada vez es más caro - sobre todo por las tasas medioambientales - y el gas, en cambio, más barato y menos contaminante. "El sorpasso del gas al carbón se produce por razones meramente económicas", dice Jorge Morales de la Fundación Renovables. Como es más barato, las eléctricas optan por el gas para generar electricidad y dejan de lado el carbón. La producción con gas natural se duplicó en el mes de mayo y ha aumentado un 67% durante los cinco primeros meses del año.
Esta caída en picado del carbón tiene varios resultados. Una positiva es la reducción emisiones de CO2 a la atmósfera. De hecho, si la tendencia sigue, España puede cerrar 2019 con un apreciable descenso en las emisiones. Pero también hay consecuencias negativas. La central de As Pontes, en A Coruña, lleva meses inactiva y es de las más importantes de España. Y esa paralización tiene ya efectos en los empleos. Por ejemplo, en los transportistas que se dedican a cargar el carbón importado en el puerto de Ferrol y llevarlo a la central térmica de Endesa.
Hay unos 150 transportistas que llevan meses sin trabajo y los 150 han puesto rumbo a Madrid en señal de protesta. Quieren pedir soluciones al Gobierno central porque creen que la paralización de la central se debe a "cuestiones políticas". Durante la tarde del martes se van a reunir con varios representantes del Ministerio de Transición Ecológica para trasladarle sus preocupaciones.