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Transmisión enfermedades

Los contagios por sífilis y gonorrea se multiplican en la última década

Según datos del Instituto de Salud Carlos III de 2016, los casos de gonorrea se han multiplicado prácticamente por cinco y los de sífilis se han doblado en diez años

Los expertos en enfermedades de transmisión sexual lo achacan a prácticas de riesgo como el chemsex, al boom de las apps para ligar y a la falta de protección porque ya "no hay miedo al contagio"

Una mujer da un preservativo a un hombre. / ChesiireCat (Getty Images)

Una mujer da un preservativo a un hombre.

Madrid

Sífilis, gonorrea y clamidia. Para Josep Mallolas, jefe de la unidad de VIH del Hospital Clínic de Barcelona, estas infecciones de transmisión sexual se han "multiplicado de forma alarmante" en la última década -especialmente en hombres de entre 25 y 34 años- por el aumento de las parejas sexuales esporádicas y la percepción de que el riesgo es hoy menor que hace unos años.

Según cifras del Instituto de Salud Carlos III, en el año 2016 se diagnosticaron 6.456 nuevos casos de gonorrea (con una tasa de 13,8 infectados por cada 100.000 habitantes) frente a los 1.423 de 2006 y una tasa diez puntos inferior, de 3,2. Los contagios por sífilis son el doble que hace una década, 3.357 en 2016 y 1.711 en 2006.

Cifras que son aún peores en las grandes urbes. Por ejemplo en Cataluña, según el último informe epidemiológico de la Generalitat relativo a 2017 la tasa de sífilis triplica a la media nacional (22,9 casos por 100.000 habitantes frente a 7,2) y la de gonorrea casi la cuadriplica (51 casos por 100.000 habitantes frente a 13,8), si bien es cierto que los últimos datos españoles disponibles son de un año antes. 

"Muchos de ellos usan las apps no solo para buscar parejas sexuales sino también para mantener sexo bajo el efecto de ciertas drogas y convocar sesiones de chemsex" explica Jorge del Romero, director del centro Sandoval que es referente en enfermedades de transmisión sexual. "Se le ha pedido respeto" añade Mallolas "y la gente acepta el riesgo por no evitar su libertad sexual". 

En el caso de las clamidias -que afectan más a mujeres-, las infecciones crecen a un ritmo aún más rápido, según cifras oficiales. Se han duplicado en solo un año, pasando de 3.563 en 2015 a 7.162 nuevos contagios en 2016. "Entre los adolescentes el uso del preservativo es excepcional, con la única intención de evitar embarazos no deseados" argumenta Mallolas. 

La buena noticia es que los contagios por VIH sí van a la baja aunque los expertos alertan del riesgo de que en pleno siglo XXI siga habiendo más de 3.300 nuevos diagnósticos al año.

 
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