Duterte ordena el cierre del principal destino turístico de Filipinas

Madrid

El presidente de Filipinas, Rodrigo Duterte, ha ordenado el cierre de la isla de Boracay, el principal destino turístico del país, para solucionar sus problemas medioambientales. Esta decisión llega apenas unos meses después de que el máximo dirigente filipino describiera la isla como un "sumidero", llegando a asegurar que sus playas de arena blanca "huelen a mierda", tal y como recoge The New York Times.

Desde entonces, el equipo de Duterte ha trabajado en varias opciones para solucionar los problemas de la isla. Entre ellas se barajaron la opción de clausurar la isla por solo dos meses al comienzo de la temporada de lluvias o un cierre por fases para modernizar el sistema de alcantarillado. Así, el gobierno evitaría que tanto los hoteles como el resto de establecimientos de la isla emitan vertidos al mar de forma ilegal,

Los departamentos del gobierno recomiendan el cierre total de la isla

Finalmente, los departamentos de Recursos Naturales, Turismo e Interior han recomendado a Duterte el cierre completo de Boracay durante seis meses, que recibió casi dos millones de visitantes el año pasado, tal y como recoge Reuters. Según la Autoridad Nacional de Economía y Desarrollo, un cierre de seis meses del área turística tendría un impacto mínimo en la economía.

Esta decisión afectará a cerca de 36.000 personas, según afirman las autoridades. Mientras tanto, se esperan pérdidas económicas de hasta 56.000 millones de pesos (874.000 euros). En la actualidad, la isla obtiene ingresos de hoteles de lujo como el Boracay Resort & Spa (de cinco estrellas) y restaurantes junto a la playa. Una isla enfocada al sector turístico que emplea a miles de residentes locales. Con el objetivo de ayudar económicamente a los afectados, Duterte adelantó que declararía el "estado de desastre" en la zona.

El gobierno modernizará el sistema de alcantarillado

Según el Secretario de Medio Ambiente Roy Cimatu, un gran número de empresas han estado vertiendo aguas residuales directamente al mar. Por esa misma razón, el Gobierno modernizará el sistema de alcantarillado, ensanchará la avenida principal y derruirá todos aquellos establecimientos considerados ilegales. Así, Duterte espera recuperar uno de los destinos turísticos más importantes del país.

Únete al canal de WhatsApp de la SER

El boom de Boracay como destino turístico supuso la entrada de una gran cantidad de dinero y la creación de muchos empleos. Sin embargo, también sobrecargó los sistemas de evacuación de agua y basura de la isla, así como sus alcantarillas y desagües. Por lo tanto, el gobierno ha decidido clausurar la isla con el objetivo de adaptarla a las nuevas condiciones.