Úrsula Corberó se pone tierna con sus compañeros de 'La Casa de Papel'
La serie de atracos de Antena 3 se despide de la audiencia...¿para siempre?
Úrsula Corberó como Tokio en 'La Casa de Papel' / Atresmedia
La Casa de Papel cierra sus puertas. La serie de atracos de Antena 3 pondrá este jueves la guinda a un pastel que se ha ido cocinando durante 14 capítulos de pura adrenalina.
Los principales responsables de la serie ya prometieron en su día que La Casa de Papel tendría uno de los mejores finales de la ficción española y los actores no dudaron en corroborar sus impresiones. Pero, ¿qué ha supuesto La Casa de Papel para sus protagonistas?
Úrsula Corberó, Tokio en la ficción, afirma que La Casa de Papel ha sido un viaje maravilloso que ha compartido con unos compañeros excepcionales: "He tenido el privilegio de compartir rodaje durante muchos meses con gente valiente de una creatividad abismal. Siento orgullo infinito hacia todas esas personitas que tanta felicidad me han dado".
Tampoco se queda corta Alba Flores (Nairobi): "Lo que más valoro de La Casa de Papel es la calidad humana de mis compañeros y haber tenido la oportunidad de vivir esta aventura con todos ellos".
"La ficción española puede soñar a lo grande"
Pedro Alonso (Berlín) hace especial hincapié en el valor de La Casa de Papel y lo que ha contribuido a subir el listón de la ficción 'Made in Spain'. "La casa de papel ha sido la confirmación definitiva de que la ficción en este país puede soñar a lo grande. En fondo y forma", afirma. "Amo a esta familia de ladrones, con los que he compartido auténticos momentos de no-tan-pura vida y mucha magia".
Por su parte, Paco Tous (Moscú) recomienda una experiencia similar a cualquier profesional: "Un buen riesgo, algo que si tienes la posibilidad, debería ser diario en el trabajo del actor".
Por otro lado, Jaime Lorente, que interpreta a Denver en la ficción, se muestra excitado con su paso por La Casa de Papel. "Ha sido como correr en un Formula uno y no querer bajar de ahí nunca", afirma el joven intérprete. "Me quedo con la parte de mí que he descubierto gracias a Denver, las ganas de luchar por la vida a pesar de todo".
Así llega el atraco a su último capítulo…
Han pasado ya cinco días desde que la banda de atracadores entrara en las instalaciones de la Fábrica de Moneda para llevar a cabo el mayor atraco de la historia. 125 horas de encierro con la policía rodeando el edificio, con decenas de rehenes que se han amotinado, que han intentado escapar y que, en algún momento, han conseguido una fuga parcial.
El desánimo y el agotamiento comienza a hacer mella. El atraco está llegando a su final. No hay vuelta atrás. O todo, o nada
