El Gobierno cierra la central de Garoña de forma definitiva
El ministro Álvaro Nadal anuncia que no se autoriza la reapertura de la instalación
La central es la más antigua de España y lleva cerrada desde diciembre de 2012
Madrid
Adiós a Garoña de forma definitiva. Tras años de análisis y debates, el ministro de Energía Álvaro Nadal ha anunciado el cierre de la central nuclear más antigua de España, ubicada en Valle de Tobalina (Burgos), y que paró su actividad el 16 de diciembre de 2012.
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La autorización para la reapertura de Garoña se denegará por orden ministerial. El propio ministro de Energía ha recordado este martes que todos los grupos parlamentarios habían pedido el cierre de la central. Y que apoyaban una proposición de ley del PSOE que implicaba su cierre. Con el PP en minoría -argumenta- no se puede garantizar una certidumbre regulatoria que dé garantías a las inversiones que se exigían para reabrir la central. "Cualquier nuclear necesita certidumbre para su operación. Y un plazo suficientemente largo -sostiene Nadal- para amortizar con seguridad sus inversiones".
La situación era más compleja -ha dicho también- porque las empresas propietarias de Garoña -Endesa e Iberdrola con el 50% cada una- no se ponían de acuerdo sobre el futuro de la central.
Economía y empleo
El Ministro ha minimizado las consecuencias del cierre sobre el empleo, con el argumento de que hay un plan social acordado con los representantes sindicales. Sobre la comarca, porque los municipios de la zona -ha recordado- seguirán recibiendo inversiones -dos millones y medio de euros al año- mientras dure el desmantelamiento de la central. Y ha asegurado que el gobierno central y la Junta de Castilla y León trabajarán juntos para reconducir su economía, para lo que ha pedido ayuda a las eléctricas dueñas de la central.
Nadal ha restado importancia también al impacto del cierre en el sistema eléctrico: la central lleva más de cuatro años parada, sin producción eléctrica, por lo que la decisión de este martes no cambia nada. Tiene apenas 400 megawatios de potencia, menos de la mitad que un reactor nuclear estándar más reciente. Sólo el 0,4% de toda la potencia eléctrica instalada hoy en España.
Nucleares en activo
Pero el responsable de Energía se ha cuidado de diferenciar su posición respecto a Garoña de la que mantiene el PP respecto al parque nuclear en activo. Ha insistido en que el partido del gobierno es partidario de prorrogar la actividad de unas centrales que muy pronto empezarán a cumplir los 40 años de vida.
En lo que va de año la energía nuclear -datos de Red Eléctrica- ha aportado el 22% de la demanda. El Ministro asegura que el cierre de esas centrales encarecería un 25% el recibo de la luz. El PSOE contesta que la luz cuesta más en España que en Europa por el modelo de funcionamiento del mercado mayorista. Pide su reforma inmediata, y un plan de transición energética con alternativas económicas para las comarcas sede de centrales nucleares.
El Gobierno ha anunciado su decisión de cierre definitivo de Garoña una semana antes de que concluyesen los seis meses del plazo quetenía para decidir el futuro de una central de primera generación, "de las que ya quedan pocas en Europa" y que comenzó su andadura en 1970.
La decisión se produce una vez que el Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) avalase el pasado mes de febrero la reapertura tras dar el visto bueno a los criterios técnicos y estableciese las medidas de seguridad necesarias para que la planta pudiese volver a conectarse a la red. La nuclear de Santa Maria de Garoña, la más antigua del parque atómico español, es propiedad de Nuclenor, participada por ENDESA e Iberdrola. Iberdrola había manifestado, por boca de su presidente, Ignacio Sanchez Galán, su voluntad de no reabrir la central, mientras que Endesa había señalado que esperaba la decisión del Ejecutivo.