Bangkok pierde una de sus señas de identidad: la comida callejera
Las autoridades del país han comenzado a despejar las aceras de Bangkok
Madrid
Durante los últimos años, la comida callejera en Bangkok ha pasado de ser una tradición a convertirse en tendencia y una de las señas de identidad más características de la capital tailandesa. Por tan solo 70 bath, algo menos de dos euros, tanto la población local como los turistas, que acuden a esta región por su gastronomía, entre otras cosas, pueden disfrutar de la auténtica esencia de Bangkok en plena vía pública.
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No obstante, la capital tailandesa está perdiendo poco a poco su seña de identidad más representativa. Las autoridades policiales han comenzado a despejar las aceras de Bangkok con el objetivo de recuperar las aceras para el normal uso de transeúntes y peatones.
Una medida para combatir la falta de higiene
Otra de las principales razones por las que las autoridades de Bangkok han comenzado a despejar las aceras esla necesidad de combatir la falta de higiene en las principales vías de la ciudad. Un gran número de puestos callejeros trabajan en condiciones mínimas de salubridad y de manejo de alimentos, razón por la que la Junta militar ha decidido desmantelar estos puestos.
Uno de los principales objetivos políticos de la Junta militar desde su llegada al poder en mayo de 2014 ha sido el desmantelamiento de aquellos puestos de comida callejera que no se consideren seguros para la ingesta humana, ya sea por la falta de higiene o por su manejo de alimentos.
La venta de alimentos en la vía pública de Ekkamai se prohibirá el 17 de abril
A través de las señales instaladas en las diversas farolas de la capital tailandesa, los gerentes de los puestos de comida callejera de la céntrica avenida de Ekkamai se han enterado de que, a partir del 17 de abril, ningún puesto podrá continuar con su actividad, lo que ha sembrado el pánico entre los gerentes de estos comercios.
En declaraciones a EFE, una de las afectadas, que se identifica como Pan, ha explicado que su familia no puede encontrar un nuevo espacio para vender su comida, que es lo único que saben hacer. Pan dice haber vendido cerdo asado en la zona durante los últimos cuatro de sus 57 años y que, debido a esta medida, no tienen garantizado el porvenir.
Como ellos, muchas son las familias afectadas por esta medida de la Junta para despejar las calles y regular la situación de una de las señas de identidad más características de la ciudad: la comida callejera.
David Justo
(Astrabudua, 1991) Periodista especializado en tecnología y buscador de historias virales e inverosímiles...