Dos penaltis fallados en una jugada de locos

Madrid

Corría el minuto 87 de los dieciseisavos de final de la FA Cup, que enfrentaba al Hull City y al Fulham, cuando Abel Hernández se convirtió en el protagonista de un suceso increíble. El delantero uruguayo lanzó un penalti que Marcus Bettinelli le atajó, pero el ariete cazó el rebote y forzó una nueva pena máxima.

Dispuesto a remendar su error, Hernández agarró el esférico y se acercó nuevamente al punto de penalti. Esta vez tiró con más convicción, el gol no iba a tener gran influencia en el devenir del partido, ya que el 4-1 del marcador hacía que el Hull City estuviera prácticamente eliminado, pero el uruguayo se enfrentaba a su orgullo. Reventó el esférico, pero Bettinelli volvió a demostrar grandes reflejos y dejó al delantero como protagonista de uno de los momentos más cómicos de lo que va de año.