Sánchez no irá más allá en sus críticas a Podemos tras el debate a cuatro
En conversación informal con los periodistas, Sánchez admite que para poder llegar a un pacto con Unidos Podemos tiene que sacarle "varios cuerpos". En caso contrario, el líder socialista da por hecho que Pablo Iglesias no va a ceder
Pablo Iglesias y Pedro Sánchez se saludan al comienzo del debate / Podem (ACN)
Oviedo
No habrá cuerpo a cuerpo de Pedro Sánchez con Pablo Iglesias en esta campaña. La estrategia del PSOE pasa por evitar que en los días que quedan de campaña su discurso se centre en el candidato de Unidos Podemos, una vez que se ha celebrado el debate a cuatro y que Iglesias ha mostrado "su verdadero yo después de pincharle un poco", según ha explicado el propio Sánchez en conversación informal con los periodistas este martes en un vuelo de Madrid a Oviedo. El candidato socialista admite que el "pico de crítica" con Iglesias se alcanzó en el choque televisivo y que ahora su campaña seguirá adelante, en positivo, con propuestas alternativas al Partido Popular.
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En realidad, Sánchez ha mantenido un perfil moderado respecto a Iglesias en los días previos al debate mientras que dirigentes como Susana Díaz o Patxi López han cargado con vehemencia contra él. Ese tono va a ser el que retomará el líder socialista una vez celebrado el debate en el que se esforzó en acusar a Iglesias de ponerse al lado de Rajoy en el no a la investidura (se lo dice unas diez veces) y le acusó de "intransigencia", "soberbia" y "rupturismo", en alusión al referéndum de autodeterminación para Cataluña en el que incidió en el debate. Sánchez endureció el tono sobre todo al reprochar a Iglesias su interés por controlar los espías, tras la reclamación del CNI que hizo Podemos en las negociaciones para formar gobierno.
El líder socialista admite que los militantes sí que quieren "que muerda" pero pone el ejemplo del amigo que se compra un coche de segunda mano y se le estropea: "No puedes decirle que se ha equivocado", explica Sánchez en referencia a su estrategia de no ofender a los votantes de Podemos "de buena fe", según sus palabras, que ahora el PSOE pretende recuperar. Esos a quienes en el debate a cuatro pidió que no vayan a tropezar dos veces con la misma piedra.
Sánchez salió satisfecho del debate porque, según él, ha activado la "reserva emocional" del PSOE y porque vendió "todo el pescado" que llevaba preparado. Su objetivo, dice el líder socialista, está cumplido: "Quería decirle cuatro cosas a Rajoy y cuatro cosas a Iglesias".
GRA123 MADRID, 14/06/2016.- El secretario general del PSOE y candidato a la Presidencia del Gobierno, Pedro Sánchez, ha repartido propaganda electoral desde el Mercado de Fuencarral hasta la Gran Vía. EFE/Juan Carlos Hidalgo / Juan Carlos Hidalgo
GRA123 MADRID, 14/06/2016.- El secretario general del PSOE y candidato a la Presidencia del Gobierno, Pedro Sánchez, ha repartido propaganda electoral desde el Mercado de Fuencarral hasta la Gran Vía. EFE/Juan Carlos Hidalgo / Juan Carlos Hidalgo
Mirando al día después
En esa conversación informal con los periodistas, Sánchez da por hecho además que para pactar con Unidos Podemos necesita "sacar varios cuerpos" a la formación morada porque, en caso contrario, creo que Iglesias "no cederá". A eso se refiere el candidato socialista cuando habla de que necesita un PSOE "fuerte", a las opciones de Gobierno que se abren si logra sacar una ventaja importante a Iglesias.
Estas explicaciones las ha dado Sánchez camino de un mitin en Oviedo donde el presidente de Asturias, Javier Fernández, ha clamado contra Unidos Podemos. Fernández es uno de los dirigentes socialistas más críticos con Iglesias y no sólo ha recordado que nunca quiso pactar en esos meses sino que ha sentenciado que Unidos Podemos solo querrá pactar con un PSOE "sometido", un partido "de usar y tirar", un PSOE "vencido".
