El papa Francisco llega a la isla griega de Lesbos para visitar a los refugiados
Francisco ha sido recibido por el primer ministro griego Alexis Tsipras, y el patriarca ecuménico Bartolomeo
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El Papa Francisco en su visita a Grecia para conocer de primera mano el drama de los refugiado. / ATLAS
Madrid
El papa Francisco ha llegado a la isla de Lesbos para una corta visita "humanitaria", en la que visitará a los refugiados y honrar la labor de la ciudadanía griega en la gestión de esta crisis.
El avión papal ha aterrizado en el aeropuerto de Mitilene, la capital de la isla, a las 10.05 hora local (07.05 GMT). Francisco ha sido recibido por el primer ministro de Grecia, Alexis Tsipras, y el patriarca ecuménico Bartolomeo, quienes le dieron la bienvenida al pie de la escalera del avión.
En el avión que le llevaba a la isla, el papa calificaba la crisis de los refugiados como la "peor catástrofe humanitaria desde la II Guerra Mundial".
"Veremos a tanta gente que sufre que está obligada a huir y no sabe adónde ir. Vamos a visitar también un cementerio en el mar, donde se ha ahogado tanta gente", aseguraba el pontífice ante los periodistas que viajaban con él.
Ya en tierras gregias, el papa ha mantenido un breve encuentro con Tsipras en las instalaciones del aeropuerto. El primer ministro griego ha aseverado que la visita del pontífice es una buena oportunidad de poner de relieve el drama que viven miles de personas que huyen de la guerra siria y que buscan un futuro mejor en Europa.
Posteriormente, el papa se ha reunido con los líderes de las iglesias católica y ortodoxa griegas para después trasladarse junto a ellos al centro de refugiados de Moria, por donde han pasado en el último año medio millon de perdonas. Allí esperan que se tramite su solicitud de asilo o, bien, que sean deportadas a Turquía. Los últimos 15.000 quedaron bloqueados cuando se empezaron a levantar fronteras a su paso en centroeuropa y los Balcanes. Desde el día 12, agentes de la agencia de fronteras europea, FRONTEX, han iniciado la devolución forzosa de refugiados a Turquía.
En esta visita el papa y los dirigentes religiosos griegos han saludado a muchos de los 3.000 refugiados del campo de Moria. Comeran con ellos y darán a conocer una declaración conjunta de las iglesias católica y ortodoxa para visibilizar la solidaridad y humanidad de Europa.
Posteriormente, en su discurso, El papa ha pedido al mundo que preste atención a la tragedia y desesperación que padecen los refugiados y responda de forma "digna" ante esta situación. "He venido aquí con mis hermanos, el patriarca Bartolomé y el arzobispo Jerónimo, sencillamente para estar con vosotros y escuchar vuestras historias. Hemos venido para atraer la atención del mundo ante esta grave crisis humanitaria y para implorar la solución de la misma", ha dicho Francisco en el campo de refugiados de Moria, en Lesbos.
Durante su visita, muchos refugiados, sobre todo niños, se acercaron al papa y le relataron sus dramas. Algunos de ellos rompieron en sollozos y le pidieron ayuda o bendición. "Esperamos que el mundo preste atención a estas situaciones de necesidad trágica y verdaderamente desesperadas, y responda de un modo digno de nuestra humanidad común", ha añadido. Confió en que se impondrán los buenos samaritanos, que ayuden con esa "fraternidad, solidaridad y respeto por la dignidad humana, que los ha distinguido a lo largo de la historia".
Por su parte, el arzobispo de Atenas y toda Grecia, Jerónimo II, expresó su esperanza en que desde Lesbos pueda comenzar este sabado un movimiento internacional que sirva para que los que "tienen el destino de las naciones en sus manos cambien el curso actual". Y que hagan "volver la paz y la seguridad a cada hogar, cada familia y cada ciudadano", ha agregado.
"Desgraciadamente no es la primera vez que denunciamos las políticas que han llevado a las personas a esta situación. Nosotros actuaremos hasta que acabe la aberración y el desprecio al ser humano", ha añadido Jerónimo durante su discurso.
El líder de la iglesia ortodoxa griega, Bartolomé, ha expresado a su turno que todo el que ve la mirada de los niños en el campamento de Moria pueden entender la "bancarrota" de la humanidad. Se ha referido así a quienes ven en los refugiados un peligro potencial para su seguridad. "Los que tienen miedo de vosotros, no os han mirado a los ojos. Los que os tienen miedo no han visto vuestros rostros. Los que os tienen miedo no han visto vuestros hijos", dijo el patriarca de Constantinopla.
Ha apuntado además que los que muestran temor olvidan que "la dignidad y la libertad trascienden el miedo y la división y que la migración no es una cuestión que afecta a Oriente Medio, el norte de África, Europa y Grecia, sino a todo el mundo".
El mundo será juzgado por el trato que ha dado a los refugiados y "todos seremos responsabilizados por la forma en que hemos respondido a esta crisis", aseveró. El Mediterráneo no debería ser una tumba, sino hacer honor a su nombre 'Mare Nostrum' y ser un lugar de paz, ha concluido el patriarca.