Carrasco evita el 'hat-trick'

Cuba

Y llegó la etapa reina de la Titan Tropic. Esa jornada que siempre marca el devenir de una competición ciclista. Los corredores afrontaban un recorrido de 119 kilómetros entre los montes tropicales que separan las localidades de Soroa y Viñales, con un desnivel positivo de 2.240 metros. Duro, muy duro.

A pocos kilómetros de la salida ya se veía el sufrimiento de los participantes, obligados a bajarse de sus bicicletas para superar las duras rampas. Y lo peor, sobra decirlo, estaba por llegar.

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Desde el comienzo se formó un grupo de favoritos. El joven Robert Bou, el cubano José Mojica y el veterano Salamero acompañaban al líder de la prueba, el colombiano Diego Tamayo. Por detrás, cuando sólo habían transcurrido 30 kilómetros, ya trataban de recortar la diferencia Ibón Zugasti y José Luis Carrasco, segundo y tercero de la general.

Zugasti y Carrasco se pusieron a tirar con fuerza hasta tomar contacto con el líder a menos de 20 kilómetros para meta. Ya entonces el resto de rivales habían quedado atrás. “Ha tirado como una locomotora”, reconocía Zugasti así el trabajo del corredor jienense.

Y se resolvió al esprint. Ojo, un esprint muy diferente de los que solemos ver en las pruebas de carretera. En este tipo de etapas, el que llega con un poco (sólo, un poco) más de oxígeno es el que triunfa. Y fue Carrasco.

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Carrasco ya había rozado varias veces la gloria en la Titan Desert, pero nunca llegó a rematar. Ya le tocaba y le tocó. Ahora los tres primeros de la general se han distanciado de verdad y ya, superado el ecuador de la Titan Tropic, parece obvio que uno de ellos será el campeón de esta primera edición.