Dos enfermeras portuguesas tuvieron que sacarse la leche frente a varios médicos para probar que dan de mamar a sus bebés

Lisboa

Dos enfermeras que trabajan en dos hospitales de Oporto han denunciado que fueron obligadas a "exprimirse el pecho para probar que tienen leche" y así poder demostrar que siguen dando de mamar a sus bebés. A partir del año de vida de sus hijos, las madres portuguesas tienen que presentar un justificante médico para seguir teniendo derecho a las horas de lactancia.

Sin embargo, estas enfermeras han denunciado que tuvieron que sacarse la leche frente a varios médicos del hospital. En declaraciones al diario portugués Publico han dicho que están indignadas porque además les han pedido pruebas periódicas, es decir, de tres en tres meses tendrán que volver a sacarse leche, algo que han dicho que no van a hacer.

Desde el hospital lo han justificado diciendo que es para evitar los fraudes pero aún así, no deja de ser una práctica humillante para las madres que sí dan de mamar a sus bebés. Por su parte, el ministro de Sanidad luso, Paulo Macedo, ha dicho que "desconoce la metodología aplicada en los hospitales de Oporto" y ha garantizado que desde el ministerio "no han dado orientaciones en ese sentido".

Pero tras la denuncia de las dos enfermeras, el consejo regional del norte del Colegio de Médicos ha decidido abrir una investigación disciplinaria a los médicos que pidieron a las enfermeras que probaran que están dando de mamar sacándose la leche delante de ellos.