Cebrián apuesta por el crecimiento de Prisa tras “el perverso ciclo” de la crisis

Madrid

Juan Luis Cebrián, presidente ejecutivo del Grupo Prisa, aseguró este lunes que ahora es el momento “de volver la mirada hacia el desarrollo de los negocios”. En la Junta Ordinaria de Accionistas 2015, celebrada este lunes, afirmó que el pasado año “marcará un hito en el devenir de nuestra empresa”, con unas cuentas que “cierran el perverso ciclo en el que nos hemos visto envueltos desde hace más de siete años y anuncian una nueva etapa en la vida de la compañía”.

Entre los hechos a destacar de 2014, Cebrián recordó la ampliación de capital suscrita a finales del verano por Roberto Alcántara a través de Occher, “gracias a la cual pudimos iniciar la recompra de deuda con descuentos”, y el acuerdo en junio para la venta de Canal+. Los fondos provenientes de la ampliación de capital y los originados por la venta de otros activos como acciones de Mediaset España y las ediciones generales de Santillana, “nos permitieron reducir nuestro endeudamiento en 780 millones de euros, obteniendo un descuento medio del 25%. Nos adelantamos así casi en un año al cumplimiento de los requisitos del plan de refinanciación”, resaltó.

Además, la deuda neta bancaria de la compañía se redujo en más de 720 millones, pasando de 3.306 millones de euros en diciembre de 2013 a 2.582 millones de euros un año después. El objetivo es reducir la deuda del Grupo en al menos 3.500 millones el presente ejercicio respecto a la cifra récord de 5.100 millones que alcanzó en 2008, coincidiendo con el derrumbe de los resultados operativos por el impacto de la crisis.

En la actualidad, la empresa se encuentra en situación de volver a “centrarse en la evolución de los negocios y en su crecimiento”, pero “todavía no hemos terminado las tareas previas”, según Cebrián. “Aunque ha sido mucho lo conseguido, necesitamos en el plazo más breve posible contar con una estructura de capital que garantice la estabilidad y continuidad de la compañía, de modo que las numerosas oportunidades de desarrollo no se vean limitadas por el endeudamiento ni intervenidas nuestras decisiones por los acreedores”, explicó.

Transformación digital

Cebrián recordó que “hace casi un lustro, anuncié nuestro propósito de que en el año 2015 los ingresos de la transformación digital del Grupo alcanzaran por lo menos un quince por ciento del total. Espero que este objetivo se vea cumplido y aun superado, pero no será suficiente porque el mercado evoluciona más rápidamente de lo previsto”, avisó.

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Junto a la digitalización, el otro vector estratégico del desarrollo del Grupo seguirá siendo el mercado del español y el portugués. En este sentido, la apuesta por América Latina continúa y se están abriendo nuevas oportunidades en países como México y Colombia.

También en España, el Gobierno ha anunciado un próximo concurso para licitar ocho canales de TDT al que el Grupo estudia presentarse.

“Estamos estudiando la oportunidad de presentarnos, pues nos parece inadmisible la presunción de que habrían de utilizarse dichos canales principalmente para reforzar el duopolio actual. Resulta además muy cuestionable que el Gobierno proceda a licitar dichas concesiones en medio de una campaña electoral como la que se avecina y de la que con toda probabilidad saldrá un gabinete de diferente perfil al de la actual mayoría absoluta. La sospecha de que el proceso pueda ser utilizado como un método de premios y castigos al comportamiento de los diferentes medios de opinión es inevitable”, indicó Cebrián.

Profesionalidad

Por su parte, el consejero delegado del Grupo Prisa, José Luis Sainz, incidió en que “debemos ser capaces de hacer crecer el resultado de las compañías aplicando los niveles de profesionalidad y eficiencia de los últimos años”.

También, es “primordial” que los productos de la compañía sean cada vez más líderes y leales a los millones de personas que cada día “acuden a nuestros medios en búsqueda de información, de rigor y credibilidad, de una forma de entender el mundo, y que son nuestros primeros y más exigentes jueces”, sostuvo.

Para Sainz, la clave será “priorizar entre los distintos proyectos existentes y mantener la política de desinvertir en aquellas áreas no rentables o no estratégicas, concentrando los recursos en las que tengan expectativas de fuerte crecimiento”.