Victoria rápida en el Vicente Calderón

Esperaba el gol el pitido incial que daba comienzo al partido. Los de Simeone arrancaron el juego con la intensidad que los distingue y mandando al larguero la primera oportunidad de la tarde. Segundos después, era Mikel González quien, en propia puerta, se encargaba de estrenar un marcador que no tardaría en volver a moverse.

El Atlético, por medio de Arda Turan y Griezmann, intentó batir a Rulli a base de jugadas combinadas y lanzamientos desde fuera del área. Rozando el minuto 10, Koke disparó desde la frontal un balón envenenado que el guardameta realista pudo sacar de primeras. El encargado de anotar el segundo y ampliar las distancias fue el francés Antoine Griezmann, ex jugador de la Real Sociedad que, por respeto, decidió no celebrar el tanto ante el equipo que lo crió.

El francés no quiso esperar para aprovechar un balón de Arda que finalmente despejó Elustondo y un córner sacado por Koke al segundo palo. Fueron los mejores minutos del jugador, que sumó su decimosexto gol como rojiblanco.

Los colchoneros mandaban con autoridad hasta que Xabi Prieto puso orden en el centro del campo y ejecutó un chut que acabó acariciando el lado derecho de la red. Por la banda izquierda llegaba Chory Castro, uno de los jugadores más activos de Moyes, para retar a un seguro Oblak.

A partir de ahí comenzó el juego de la Real, que buscó jugar en el centro del campo con Rubén Pardo, Canales o el propio Prieto. Los mediocentros se hicieron con el control y consiguieron quitar el balón a un Atlético por momentos solo superior en número de goles.

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Pese a recibir dos golpes fuertes, la Real se repuso y creó peligro sin llegar a consumar sus ocasiones, con falta de fortuna de cara a portería. Buscando dar un paso adelante que le permitiera meterse en el partido, el conjunto donostiarra abrió el campo e intentó hacer daño con internadas por ambas bandas. El Atlético perdía balones y la Real intentaba montar una buena contra.

Arda volvió a salirse del guión para mandar balones arriba mientras David Moyes pedía más presión a sus jugadores, que adelantaron líneas para manejar un partido que se tornó mejor de lo que señalaba el marcador.

Una de las mejores del partido la tuvo Jorge Resurrección en sus botas. La joven perla rojiblanca buscó el segundo palo y le pegó directamente a un balón que sacó astillas de la cruceta, pillando por sorpresa al guardameta.

El Atlético quiso volver a marcar el compás con un disparo de Arda que no llegó a cabecear Griezmann. Simeone, inquieto, movió ficha dando entrada a Jiménez y sustituyendo a Fernando Torres.

Los rojiblancos demostraron superioridad y reconquistaron el centro del campo. Gámez protagonizó una rápida recuperación por la derecha, puso la bola en el área haciendo que Rulli sacara una buena mano y Siqueira remató golpeando con el esférico a un defensa de la Real Sociedad.

El conjunto local aprovechó el cariño de su incondicional afición, que llenó el Calderón un martes como si de una entrada de fin de semana se tratara, para afianzar la tercera plaza de la tabla tras el empate del fin de semana del Valencia ante el Villarreal.

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Moyes dio entrada a Aguirrexte y Finnbogason con la intención de animar el partido y sacar algo positivo. El último en entrar fue Esteban Granero, que recibió una sonora pitada de la grada colchonera y mandó una falta a la escuadra para que Oblak se luciera en una estirada en los últimos minutos del encuentro.

Pese a ejercer de dominante durante muchos minutos, la Real se alejó del Manzanares de vacío y con los 37 puntos que traía a cuestas. Los de Simeone, a falta de ocho jornadas, se plantan en 65 con una cómoda victoria en casa.