Marlaska afea a los vocales del CGPJ enterarse por la prensa de que exijan que el pleno y no la permanente con mayoría conservadora, decida el futuro de Ruz
En un correo electrónico dirigido a los vocales del Poder Judicial, el vocal del Consejo y presidente de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional tilda de "desconsiderada" y ajena a la "mínima buena fe" su actitud
Madrid
"No puedo por menos que considerar vuestra actitud de, al menos, desconsiderada". "Os suena de algo la transparencia". "Os recomiendo repasar" los valores de la Constitución.
En estos términos reprochaba ayer Fernando Grande-Marlaska en un correo electrónico dirigido a los vocales del Consejo General del Poder Judicial, enterarse por la prensa de que siete de ellos han pedido que sea el pleno del Gobierno de los jueces, y no la Permanente, con mayoría conservadora y controlada por el presidente, Carlos Lesmes, quien decida sobre la renovación del juez Ruz.Estos siete vocales consideran una "gran irresponsabilidad" que no sea todo el pleno el que dirima una cuestión de tal relevancia.
No faltan voces que recuerdan que Ruz investiga asuntos de gran complejidad y trascendencia, como los que afectan al Partido Popular en los casos Gürtel o Caja B, y que echar ahora al magistrado, cuando la ley - en concreto el artículo 355 bis de la Ley Orgánica del Poder Judicial - ampara su continuidad, pone en entredicho la independencia del Poder Judicial.
La comisión permanente pretende sacar el martes a concurso la plaza del juez Ruz y ofrecerle que continúe como juez de refuerzo cuando se incorpore el titular, investigando los casos complejos que lleva en la actualidad, pero no existen garantías de que esto sea así porque la decisión sobre quién instruye las causas depende del titular del juzgado y no del CGPJ.
Lo contrario incumpliría el principio del juez predeterminado por ley.En su correo, Marlaska, quien hasta no hace mucho era considerado un hombre cercano a Pablo Ruz, se lamenta ante la actitud de sus compañeros del consejo: "me habéis acostumbrado a no inmutarme ante supuestos ajenos a una mínima buena fe".