Cebrián: "El problema es la manipulación de la identidad por el poder político"

Juan Luis Cebrián ha participado esta tarde en la presentación del libro '1914. El año que cambió la historia', de Antonio López Vega. En el acto, el presidente del Grupo Prisa ha alertado de "los nacionalismos que levantan la bandera de la identidad" y ha analizado la "marginalidad de España" a nivel internacional

"Los pueblos y las personas tienen derecho a la identidad, el problema es la manipulación de la identidad por el poder político, cosa que sucede con el nacionalismo español, el nacionalismo catalán o cualquier otro nacionalismo. Entonces para ponerse de acuerdo hay que renunciar a la manipulación por parte del poder de esos sentimientos de identidad. Ahora bien, si lo que estamos es ante un choque de identidades, a la Cataluña profunda levantamos la España profunda, pues estamos muy mal", ha señalado Juan Luis Cebrián.

El presidente del Grupo Prisa ha explicado que "si el Gobierno de Madrid piensa que un diálogo con el Gobierno de la Generalitat y un acuerdo va a herir los sentimientos de los partidarios de la España profunda y va a devenir entonces en una reducción de la votación que van a tener en las próximas elecciones, pues estamos mal situados" y ha subrayado que "hay sociólogos que trabajan para el Gobierno que dicen que si vamos a un acuerdo, igual ganan 300.000 votos, y si van a una confrontación, igual ganan tres millones de votos"

Sobre el protagonismo de los nacionalismos en los conflictos bélicos siglo XX, Cebrián apunta que "es un cáncer de la convivencia entre los pueblos, que corroe constantemente lo que podíamos llevar la gobernación del espacio público compartido, que es en definitiva a lo que se dedica la política". "Es un cáncer el nacionalismo localista, pero también el nacionalismo de los Estados nación. Es un cáncer cualquier tipo de nacionalismo que, en definitiva, lo que levanta es la bandera de la identidad frente a hablar del conflicto entre identidad e ilustración, que es lo que está viviendo este mundo desde hace unas cuantas décadas", sostiene el presidente del Grupo Prisa.

Cebrián también ha destacado la marginalidad española a nivel internacional. "Marginalidad en la I Guerra Mundial siendo un país neutral; marginalidad en la II Guerra Mundial pese a no haber mantenido una neutralidad auténtica, puesto que era un aliado del eje aunque por razones x no fue un aliado claramente activo, salvo en el caso de la división azul. Y por lo tanto, una especie de aislamiento o alteridad de España respecto al decurso de los países europeos", ha sentenciado.

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