Verdasco encarrilla la permanencia de España en la Davis

El primer partido de la serie entre España y Ucrania se presumía como el más disputado de los cinco puntos. En la arena, dos tenistas tendentes a lo mejor y lo peor en pequeños espacios de tiempo. Capaces de victorias épicas y desastres inesperados, los talentos de Dolgopolov y Fernando Verdasco abrían la eliminatoria.

La presencia de Verdasco en la jornada del viernes es sin duda la apuesta personal de Álex Corretja. Jugando en casa, rodeado de su gente y necesitado de un acicate tras un año en el que ha ido de menos a más, Verdasco saltó a la pista con sus argumentos de siempre, tratar de sacar fuerte aprovechando ser zurdo y ponerse de derecha. Su tenis, menos fino que el de su rival requirió de un tiempo para calibrarse: el primer set.

Algó fallón y con poco acierto al saque, Verdasco cedió su servicio pronto. La grada poco podía hacer, siendo generosos no pasaba de un tercio del aforo. Así Dolgopolov se sintió cómodo y desplegó su tenis discontinuo, repleto de variedad, bolas largas, dejadas y otros recursos muchas veces difíciles de entender. Primer set para Ucrania y cierto runrún en la platea.

Corretja habló con Verdasco, le dio ánimo y le empujó a ser algo más agresivo. El madrileño entendió la idea y puso a Dolgopolov unos centímetros más atrás de donde venía jugando. Su saque cogió vuelo y se elevó hasta un 71% de acierto, la grada también asimiló el mensaje de Álex y comenzó a empujar en la medida de lo posible. Tras tres bolas de break que se fueron al limbo, Verdasco rompió a Dolgopolov y se hizo con el segundo parcial.

La batalla entre dos talentos a veces incomprendidos y casi siempre volubles estaba en su punto más álgido. Con el choque igualado, el más mínimo detalle iba a ser crucial para dos jugadores que crecen cuando van por delante pero se achican en la derrota. Verdasco sufrió, libró situaciones delicadas al servicio, varios 0-30 y eso le ayudó en un set en el que hasta el final fue una verdadera montaña rusa.

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En las postrimerías del set, al igual ocurriera en el segundo, Fernando logró quebrar el saque Aleksandr. Otro golpe más para el ucraniano que veía como se iba desinflando con el paso de los minutos. 2-1 para Verdasco y todo de cara para que España se pusiera por delante. Y más que se le iba a poner cuando Dolgopolov tirara a la basura su primer turno de saque en la cuarta manga.

Y justo ahí se acabó el partido, Fernando puso la moto y el ucraniano dimitió del choque. El público empezó a arengar y a sonar. La gente saliendo de sus trabajo, el final del partido llegó a reunir más de 6.000 personas en la Caja Mágica, la mayoría a la espera de ver el retorno de Nadal. 1-0 para España y serie encarrilada para el equipo de Corretja, que acertó de lleno con Verdasco.

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