La Delegada del Gobierno dice que el desalojo del Madrid Arena evitó "un mal mayor"

La Delegada del Gobierno en Madrid, Cristina Cifuentes, ha elogiado el trabajo de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado por el desalojo "casi individual" del Madrid Arena tras la estampida que causó la muerte de tres chicas en una fiesta de Halloween porque ha evitado "un mal mayor".

Cifuentes ha manifestado su "más sentido pésame" a las familias de la tres jóvenes fallecidas "en un momento de mucho dolor y sufrimiento", y su "apoyo" a las de las dos chicas que se encuentran en estado crítico.

"Cualquier madrileño podía ser padre, madre o hermano de alguna de las personas que acudieron a la fiesta", ha observado la delegada, al señalar que su hijo de 20 años estaba anoche en el Madrid Arena.

Según le ha comentado su hijo, en un momento dado vio "más movimiento del normal", por lo que él y sus amigos decidieron moverse hacia otro lado del recinto, de manera que no sufrió ningún daño. Cifuentes ha añadido que su hijo le ha dicho que el desalojo se hizo "muy bien" y que muchas personas no llegaron a enterarse de lo que había sucedido.

La delegada ha felicitado a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado "por un desalojo realizado con mucha eficacia, casi individual", que "ha evitado un mal que podía haber sido mucho mayor". También ha felicitado al Samur, que, según ha destacado, "ha demostrado una vez más su profesionalidad con su rápida intervención".

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En cuanto a las circunstancias en que se produjo el suceso, Cifuentes ha relatado que todos los testimonios recabados coinciden en que el origen fue una bengala que, al prender, "generó confusión y una situación de avalancha". Ha añadido además que la Policía Nacional lleva a cabo en estos momentos una investigación "exhaustiva" en la que participan el Grupo V de Homicidios de la Jefatura Superior de Policía de Madrid y la Policía Científica.

Respecto al hecho de que una de las víctimas que permanece en estado crítico en el Doce de Octubre sea menor de edad, ha indicado que "será la organización del evento la que tendrá que explicar cómo pudo acceder", ya que era la encargada de controlar los accesos y de mantener la seguridad.

A raíz de lo ocurrido, según Cifuentes, en la Delegación del Gobierno se han recibido un centenar de llamadas de padres preocupados porque no sabían si sus hijos habían resultado heridos o fallecidos en este evento.