La bolsa vive la segunda peor semana del año
El Ibex 35 cierra sesión el viernes dejándose un 2,1%, y un 5,8% en el conjunto de la semana. Los renovados temores a la recesión tiran para abajo de nuevo de todos los índices europeos.
Si alguien esperaba que la última sesión bursátil de la semana traería un rebote para compensar las abultadas pérdidas de jueves, se equivocó. El viernes ha sido una sesión que arrancó en negativo, con retrocesos muy importantes, se desarrolló enteramente en rojo, y acabó con una caída en el Ibex 35 del 2,11%. El selectivo se ha quedado así en 8.141 enteros.
El día ha sido igualmente malo en el resto de plazas europeas, que casi sin excepción han cerrado con caídas significativas. Londres se ha dejado un 1%, París un 1,9%, Milán un 2% y Frankfurt un 2,1%.
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Con todo, el Ibex 35 ha cerrado la segunda peor semana del año (-5,8%), y encadena cuatro semanas seguidas de pérdidas.
Los analistas coinciden en que los inversores no se sacuden los temores que les han ido embargando en los últimos días. El estado de ánimo general, según resumía a la SER el analista económico Juan Ignacio Crespo, es el "miedo generalizado a la desaceleración a las economías más importantes del mundo, sumado con el estado de nerviosismo en relación con los problemas de la deuda pública en Europa y Estados Unidos".
Se constata además que, ante este nerviosismo, los inversores siguen buscando los valores considerados tradicionalmente como más seguros. El ejemplo más claro es el oro: su precio ha llegado a tocar durante la sesión los 1.877 dólares, batiendo un nuevo récord. La rentabilidad de los bonos alemanes y estadounidenses seguía también muy baja, prueba de que sigue habiendo mucha demanda de estos títulos, considerados asimismo refugio.
En todo caso, las tensiones en las bolsas no se ha trasladado al mercado de deuda, donde las turbulencias se han aplacado desde que, en el, primer domingo de agosto, el Banco Central Europeo anunciase la compra de bonos españoles e italianos. La prima de riesgo española ha permanecido estable durante toda esta última semana, para situarse, al cierre de los mercados el viernes, en torno a los 290 puntos básicos.