Los petrodólares aterrizan en las cajas españolas

La visita de José Luis Rodríguez Zapatero a Emiratos Árabes Unidos y Catar concluía hace unos días con el anuncio de que estos dos países invertirán 150 y 300 millones de euros respectivamente en las cajas españolas.

El dinero que estos dos Estados inyectarán en el sistema financiero español procede de sus fondos soberanos, o lo que es lo mismo, vehículos de inversión de los que dispone un país y que utiliza para hacer inversiones de futuro. Los principales se encuentran en países de Oriente Medio, grandes exportadores de materias primas y en China, gracias a la venta de sus productos manufacturados. En el mundo destaca además el potencial de los fondos soberanos de Chile y Noruega.

Mientras en España se debate cómo ahorrar gasolina y el precio del crudo y de las materias primas en el mundo ha entrado en una tendencia alcista por la crisis política que vive Libia, la inflación aumenta. La primera consecuencia la anunciaba este jueves el Presidente del Banco Central Europeo, Jean Claude Trichet: el precio del dinero podría subir en los próximos meses. David Cano, Socio de Analistas Financieros Internacionales, considera este anuncio "la consecuencia directa del alza del precio del petróleo que se traducirá en un repunte del Euribor justo cuando en España se veían los primeros síntomas de reactivación del consumo y la confianza en la economía".

La subida de los tipos de interés repercute directamente en el precio de las hipotecas pero, según David Cano, "puede también afectar a la fluidez del crédito por lo que es necesario aumentar el capital del sistema financiero español". "En apenas dos años veremos cómo las cajas de ahorros se convierten en bancos y un porcentaje de ellos podría estar en manos de fondos soberanos". El saneamiento de sus cuentas hará fluir el crédito aunque existe el riesgo de que, la obra social que han hecho las cajas de ahorros en España, desaparezca.

España también cuenta con un fondo soberano. Procede del fondo de reserva de la Seguridad Social y, en la actualidad, asciende a 68.000 millones de euros. Su finalidad es la sostenibilidad del sistema de pensiones y se destina sobre todo a comprar deuda pública. Para Emilio Olabarría, Diputado del PNV, "el superávit de la Seguridad Social podría estar en riesgo porque en la actualidad, el 70% de sus fondos se invierte en la compra de deuda pública española" mientras Eduardo Madina, Secretario del Grupo Socialistas en el Congreso, defiende que "el fondo sale reforzado porque el paso de los intereses repercute en su ampliación".

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