Munitis fue el único capaz de batir a un gran Diego Alves

Un Racing mermado por las bajas en su línea medular, por las lesiones de Arana y de Tziolis, que estará apartado de los terrenos de juego por la rotura de tibia sufrida días atrás en su compromiso con la selección griega, recibía a un Almería que llegaba a Santander dispuesto a repetir el triunfo que cosechó la pasada temporada en El Sardinero.

Para evitar que la velocidad de Piatti, Crusat y Uche volviera a desnivelar la contienda del lado del cuadro andaluz, el Racing salió con la consigna de no descuidar las bandas, para lo cual Portugal situó en los laterales a Francis y Cisma, habituales titulares en los flancos.

También el Almería empezó con mucha prudencia, con sus líneas muy replegadas a la espera de sorprender a la contra. Así, cuando apenas se habían jugado cuatro minutos, el Racing había disparado dos veces a puerta, ambas por mediación del argentino Ariel Nahuelpan, la primera ligeramente desviado y la segunda atajada por Diego Alves.

El guardameta brasileño fue el protagonista del inicio del encuentro, ya que poco después volvía a evitar que se adelantara el Racing, con una gran intervención a disparo del sueco Kennedy, desde la frontal del área.

Aunque la defensa del Almería cometió algunos errores en los marcajes, los cántabros siguieron adoleciendo de la falta de puntería de jornadas anteriores y no encontraron portería en sendos disparos de Colsa, desde la media luna del área y en un testarazo de Torrejón, a saque de esquina.

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Pero, superada la primera media hora de juego, apareció Munitis para marcar un excelente gol . El veterano delantero interceptó un mal pase en horizontal en la línea de medios del Almería y se perfiló para batir a Diego Alves, desde veinticinco metros, por la escuadra.

A partir de ahí, el Almería adelantó sus línea y pudo empatar con un disparo de Corona ligeramente desviado y con otro de Crusat, que despejó Toño.

Tras el descanso el Racing salió más entonado que el Almería y pudo aumentar su ventaja a disparos de Rosenberg y Kennedy, pero Diego Alves respondió con sendas buenas paradas. No obstante, el Almería reaccionó y pasó a llevar el peso del partido, con el Racing más replegado para defender su ventaja.

Y para reforzar ese planteamiento, Portugal sentó al punta Ariel y sacó al centrocampista Mehdi Lacen, con lo que Munitis dejó banda para jugar en la media punta.

Aún así, las mejores ocasiones seguían siendo del Racing, pero Diego Alves mantuvo su buen nivel con dos grandes paradas a disparos de Kennedy y Rosenberg; quien además dispuso de la oportunidad más clara en un contragolpe con el que se plantó solo ante el meta para cruzar en exceso.

Poco después el delantero sueco cabeceo a la madera y, a continuación desperdició un nuevo contraataque en un mano a mano con el portero brasileño. Cuando Rosenberg fue sustituido abandonó terreno cabizbajo, pero el público le despidió con aplausos, que se convirtieron en ovación cuando, más tarde, fue sustituido Munitis, el mejor del Racing.