Kraft compra el negocio de galletas de Danone por 5.300 millones
Ambas compañías confían en que la operación se cierre a finales de año
Madrid
Kraft Foods ha sellado un acuerdo para adquirir el negocio de galletas del grupo Danone, lo que incluye las marcas Lu, Tuc y Prince, por 5.300 millones de euros en efectivo (7.200 millones de dólares), según anunció hoy la multinacional estadounidense. Ambas compañías confían en que la operación se cierre a finales de año, después de que Danone consulte con su comité de empresa, tal y como establece la normativa francesa, y las autoridades de la competencia den ''luz verde''.
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La compra, que se financiará a través de deuda, incluye las marcas líderes de galletas de Danone y operaciones y activos en 20 países, como 36 plantas de producción, pero no incluye las sociedades de riesgo compartido (joint-venture) de Danone en Latinoamérica e India.
Durante 2006, el negocio de galletas objeto de adquisición generó ingresos de 2.000 millones de euros (2.700 millones de dólares) y un resultado bruto de explotación (Ebitda) de 390 millones de euros (525 millones de dólares).
Kraft indicó que la sede europea del negocio permanecerá en el area metropolitana de París y recalcó que no tiene intención de cerrar ninguna de las plantas de producción de galletas de Danone en Francia durante al menos tres años después de la firma del acuerdo.
Una vez cerrada la transacción, Georges Casala, que actualmente dirige el negocio de galletas de Danone, se unirá a Kraft como miembro clave de su equipo, reportará al presidente de Kraft International, Sanjay Khosla, y dirigirá todo el negocio de galletas en la UE, incluyendo las marcas y operaciones adquiridas en la Península Ibérica.
Un gran paso para Kraft
Con una plantilla de aproximadamente 15.000 personas en todo el mundo, el negocio de galletas de Danone "tiene un modelo de negocio de éxito y un equipo directivo con talento", sostuvo la multinacional estadounidense en un comunicado.
Con esta adquisición, Kraft aspira a ganar mayor escala operativa y acceder a mercados emergentes "críticos", como China, Rusia, Polonia, Indonesia y Malasia, que representan más del 25% del negocio.
En cuanto a las razones para la cesión por parte de Danonde, se ha aludido al hecho de que la actividad de galletas del grupo francés experimentaba una evolución fluctuante (del -3% al +3% en los últimos años) que contrastaba con la progresión, en torno al 10%, de los otros dos negocios: los productos lácteos y las bebidas.
El presidente de la compañía francesa, Franck Riboud, ha señalado que "esta operación daría la oportunidad al grupo de centrar totalmente sus esfuerzos de investigación y de innovación en el crecimiento rápido de sus divisiones de productos lácteos frescos y bebidas con agua de manantial o mineral".
Protestas de los sindicatos
Los sindicatos de LU han manifestado su inquietud ante el anuncio y se han quejado de una venta precisamente en un momento en que la filial de galletas se había recuperado tras la aplicación de un plan de reestructuración iniciado en 2001.
Ese ajuste supuso el cierre de siete plantas en Europa (de las cuales dos en Francia) y la supresión de 1.816 puestos de trabajo, un 12% del total de los efectivos. En Francia, LU mantiene nueve plantas y tres almacenes, con una plantilla de cerca de 3.000 empleados.
