Zapatero admite ante sus 'barones' que la financiación es el principal escollo en la negociación del Estatut
El presidente del Gobierno apuesta porque el Estatut salga adelante, aunque sea sin el apoyo de Ciu
El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, reunió anoche en una cena en el Palacio de La Moncloa a los presidentes de las autonomías gobernadas por el PSOE. Fueron cuatro horas en torno a una misma mesa, con Zapatero como anfitrión y la reforma del Estatuto catalán como tema casi exclusivo. Zapatero reconoció que la financiación es ahora mismo la principal dificultad en las negociaciones.
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Todos los barones del PSOE coinciden en señalar que Zapatero dejó bien claro anoche cuáles eran las líneas rojas de la negociación sobre el Estatut. El presidente del Gobierno apostó porque el Estatuto saldrá adelante, porque así saldrá también fortalecido el proyecto del PSOE. Pero sin embargo, en la reunión planeó como una sombra la última reunión que el portavoz parlamentario, Alfredo Pérez Rubalcaba, había mantenido por la tarde con CIU. Rubalcaba expresó cierto pesimismo en relación con la distancia que existe con CiU en materia de financiación y Pascual Maragall recogió el guante y fue más allá al asegurar que este Estatuto se puede sacar adelante sin la coalición nacionalista.
La estrategia de CiU
Barones como Ibarra, Barreda o Patxi Lopez defendieron la importancia de que se apruebe un texto con los votos de los convergentes, ya que con el PP no se puede contar. Rafael Simancas pidió a sus compañeros que no se descartara de la negociación la posibilidad de que el Estatuto se devuelva. "Si no hay estatuto no pasa nada", contestó Zapatero, aunque aseguró que lo habrá, respetando el articulo 2 de la Constitución y un sistema de financiación en la línea de lo ofertado por el ministro Solbes, pero con retoques. Patxi lopez subrayó la importancia que tiene para Euskadi el hecho de que se apruebe el estatuto catalán:"Es lanzar el mensaje de que cuando las cosas se hacen por la vía constitucional se aprueban, frente a lo que ocurrió con el Plan Ibarretxe"
Fuentes de Moncloa han valorado como muy positivo el encuentro de anoche y han dejado claro un mensaje: hoy por hoy, al Gobierno le gustaría contar con CiU, al igual que con el PP. Ahora bien, si CiU se cierra en banda, ya se verá. Desde Moncloa se cree que la estrategia de CiU de poner problemas a casi todo es una táctica que ya se está agotando a estas alturas de la negociación y se señala que si no hay acuerdo en financiación perderá CiU y todos los partidos
