Pablo Gómez Molina: "Hacer este disco ha sido casi terapéutico"

Madrid

Arrancamos La Ventana de la Música en 2022 presentando dos propuestas de artistas de distintas generaciones que debutan por primera vez en esta sección: Rita Payés & Elisabeth Roma, que nos presentan 'Como la piel'; y Pablo Gómez Molina, con 'Ateo en el amor', dos estrenos discográficos independientes que beben de las mismas fuentes y que son un canto de amor a la música de raíces latinas.

La historia de Pablo es la de un percusionista consagrado de 42 años que, después de 20 años tocando y acompañando a otros músicos, decide dar el salto a componer y cantar sus propias canciones e incluirlas en un disco que ha titulado 'Como ateo en el amor'. Sin embargo, el artista matiza este título: "Ser ateo en el amor es casi imposible porque todo es amor, no se puede pensar que no existe. Este nombre es una especie de declaración victimista, es un farol", explica.

Rita Payés, de 22 años, y su madre, la guitarrista clásica Elisabeth Roma, han firmado su segundo trabajo juntas, 'Como la piel', un disco que, desde la base del jazz, la bossa nova o la música popular, dibuja un universo contemporáneo muy rico. Madre e hija llevan desde niñas tocando, pero en los tres últimos años han consolidado una unión artística que empezó con versiones y continúa con temas compuestos por la propia Rita, que también da su punto de vista sobre algo tan difícil de comprender como el amor.

Para Rita, "tocar con la familia es lo máximo".  "Simplemente pasó. Es algo que ya pasaba a nivel familiar, tocábamos muchas veces juntas. De pronto apareció la idea del disco y tiramos para adelante", añade. Pablo, que se ha estrenado como solista en la madurez, asegura que "fue algo casi físico". "Tenía muchas ganas de decir alguna cosa por mí mismo, he acompañado a muchos artistas y quería enfrentarme a un disco en solitario. Ha sido un trabajo casi terapéutico". 

Tiempos duros para los músicos independientes

Además de las raíces latinas, estos tres artistas comparten el hecho de que se editan de manera independiente.  "La ventaja es que puedes hacer lo que te dé la gana, no dependes de la opinión de nadie", comenta Elisabeth, a lo que su hija añade que "el primer disco fue un regalo de cumpleaños" para su madre, y no contaba ni siquiera con carátula. "Ha sido una suerte poder mantenerlo tan personal", asegura.

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Por otro lado, todos han lamentado la situación en la que se encuentra la industria musical como consecuencia de la pandemia del coronavirus. "El arte ya estaba maltratado antes de la pandemia", opina Pablo, "si se nos quita la única manera que tenemos de ganarnos la vida, entiendo que haya muchos músicos que se replanteen su vida". Una afirmación que suscribe Rita, quien asegura que "muchos compañeros han tenido que abandonar la música". "Es una pena gigante que no se tenga más consideración por lo que hacemos", añade.