Queremos votar en Alemania

Madrid

Lo decimos a veces en las tertulias. Los europeos deberíamos votar en las elecciones de EEUU porque sus resultados influyen mucho en nuestras vidas. Ahora deberíamos añadir: ojalá los españoles votásemos en las elecciones alemanas. Porque la política del principal país de la Unión Europea no solo influye, sino que casi determina nuestros afanes cotidianos. A juzgar por las intenciones del nuevo gobierno alemán, que se estrena dentro de pocas horas, parecería que esos deseos han sido escuchados. Socialdemócratas, verdes y liberales se han conjurado en un programa insólito, diferente a todo lo anterior, que debería dotar a la Unión de más intensidad integradora, más democracia política y más empaque moral. El gobierno semáforo ha prometido a los ciudadanos alemanes, y por tanto a todos los del continente, luchar por un "Estado federal europeo"; basarse en la Carta de Derechos Fundamentales; reforzar el Parlamento de los 27; aumentar la transparencia de las instituciones comunes; usar más el método comunitario que el regateo intergubernamental; cambiar los tratados y aumentar el número de decisiones adoptadas por mayoría absoluta, arrinconando así el derecho de veto de un socio contra los demás en el Consejo. Son los ideales que comparten la mayoría de los ciudadanos españoles. Y aunque en algunas políticas concretas, como la económica, los avances no son tan siderales y habrá que fajarse, los propósitos de Olaf Scholz y los suyos son, desde el punto de vista europeo y europeísta, impresionantes. Willkommen.