"Compartes experiencias, contactos e incluso ligues": así es la aventura de viajar sola por el mundo
Viajar en solitario es una opción cada vez más atractiva, como nos ha contado la fotógrafa Helena Palau, que acaba de publicar en 'Supongamos que viajo sola' sus experiencias por todo el mundo
La Ventana a las 16h | 'Supongamos que viajo sola'. El diario de viajes 'en solitario' de Helena Palau
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Madrid
Viajar en solitario se está convirtiendo en una experiencia imprescindible para los jóvenes, que cada vez escogen más esta opción frente a los viajes en familia, con amigos o en pareja. Aunque estos últimos siguen siendo los más populares, viajar en solitario puede aportar cosas que la compañía no, como descubrió la fotógrafa Helena Palau, que acaba de publicar su libro ‘Supongamos que viajo sola’.
Unos días en Nueva York, un mes y medio en Vietnam
La primera vez que Palau pisó la ciudad de Nueva York lo hizo sola, a los 20 años, aprovechando que estudiaba en Canadá y el viaje era más corto que desde su Barcelona natal. “Tenía muchísimas ganas de ir a Nueva York y pensé que sería una ciudad muy interesante, tan excitante como enfurecedora”, ha explicado la fotógrafa en La Ventana. “Es curioso porque hay muchísima gente pero sí que te puede hacer sentir que estás un poco sola porque nadie te hace mucho caso”, explica.
La soledad de verdad no la conoció en Estados Unidos, sino en Vietnam: ”Fue un mes y medio de mochilera, una mochila delante y otra detrás de doce kilos cada una, y ese sí que fue revelador, en el sentido de descubrir lo que es la soledad viajando”.
De esta soledad, matiza que “puedes no estarlo para empezar si no quieres”. En sus viajes ha encontrado a numerosas personas, sobre todo jóvenes, “que están en la misma situación que tú, que está completamente abierta a descubrir y a conocer nuevas personas y nuevos lugares, y es increíble, porque compartes experiencias, contactos o incluso ligues, entonces es muy interesante escoger cuándo quieres estar sola y cuando no”.
Viajeras, en femenino
Viajar sola, especialmente siendo mujer, no siempre es sencillo. Hay ciertas precauciones extras que cualquier viajera en solitario tiene muy en cuenta dado el estado, en principio, vulnerable en el que se encuentra. Aun así, Palau ha sabido sacar un lado positivo al ser mujer: sentirse libre de las exigencias del día a día que sí experimentaba en casa.
Como cuenta Palau, “algunas experiencias me hicieron aprender mucho sobre mí misma por ejemplo cuando fui a Aruba, que es una isla muy pequeñita encima de Venezuela". "Fui sola dos semanas, y de repente me di cuenta de que no me había depilado en esas dos semanas”.
“Yo era una persona que se depilaba, muy a mi pesar, desde pequeña porque así se hacía y no había vuelta de hoja. Estando allá no me conocía absolutamente nadie, además yo no tenía ninguna intención de hablar con nadie, con lo cual yo estaba muy tranquila y me di cuenta de que el problema no eran los pelos, era la gente, lo que pensaba la gente de mis pelos”, relata.
Estas experiencias han permitido a Palau plantearse, cuestionarse, aceptar o querer cambiar ciertas actitudes que hacia por la apariencia o por pura inercia, "y esto yo lo relaciono mucho con el feminismo del día a día, las tareas que tenemos como mujeres de pensar en nosotras y en lo que hacemos y por qué lo hacemos”.
¿Conectar o desconectar?
Palau comparte sus viajes en redes sociales, su cuenta de Instagram alcanza los casi 60.000 seguidores. “Viajando a mí me gusta estar conectada, aunque luego decida no escribir a mis padres durante días porque saben que estoy bien, me gustar estar conectada, me siento más a gusto, me siento más segura”, manifiesta.
“También creo que de alguna manera estar en redes, colgar historias y hablar con personas me aporta cosas”, explica, recordando por ejemplo la vez que en un autobús camino a Kädva, en Estonia, se encontró, de forma completamente fortuita, a varias de sus seguidoras.
Aunque es cierto que el concepto de los viajes en solitario ha cobrado popularidad, el 2021 ha visto un descenso en este tipo de viaje: del 7,6% de las personas que lo elegían en 2020, ha bajado al 3,7%, de acuerdo con la Confederación Española de Agencias de Viajes. Es posible que, aunque a los españoles les gusta cada vez más viajar solos, después de lo ocurrido en 2020 queramos, más que nada, compartir todas las experiencias posibles con nuestros seres queridos, incluidos los viajes.
Paula García
Redactora en prácticas en La Ventana desde 2021. Previamente en la Agencia Efe en Madrid y Berlín, Alemania....