Vacúnese, por tercera vez
Xavier Vidal-Folch reflexiona sobre la administración de la tercera dosis de la vacuna contra el covid-19

El análisis de Xavier Vidal-Folch | Vacúnese, por tercera vez
El código iframe se ha copiado en el portapapeles
Madrid
Si tiene un cáncer, vacúnese. Aunque sea cronificado, póngase la tercera vacuna. Si cuenta más de 60 años, pínchese por tercera vez. Si no se ha vacunado, hágalo cuanto antes. El reparo a la nueva inmunización es en general estúpido. Porque vale más vivir que morirse. Y es mejor pasar una fiebre (lo que puede ocurrir con cualquier inyección) que enfermar gravemente. El negacionismo activo es suicida. El negacionismo pasivo, por pereza, escepticismo o ignorancia, es simplemente idiota. Y ya sabemos que es mejor ser listo que tonto. Solo hay una coartada digna para cuestionarse la tercera vacuna. Y es el bajísimo índice de vacunación en países vecinos, como nuestros amigos del Norte de África. Algunos médicos proponen una alternativa inteligente: por cada tercera vacuna en el primer mundo, que este haga donación de otra a los países pobres, al tercer mundo. Revacúnense a tope por Navidad. No esperen a que les vuelvan a confinar, como en Austria. Ni a que les obliguen a pincharse. Ni a que el Gobierno proclame la emergencia nacional, como en Alemania. Hagan como siempre. Sean sensatos.

Xavier Vidal-Folch
Periodista de 'EL PAÍS' donde firma columnas y colaborador habitual de la Cadena SER, donde publica...