Suecia ha amarrado el liderato del grupo E con una victoria ante Polonia (3-2) que además ha impedido que España acceda a octavos de la Euro 2020 como primera. Los escandinavos amarraron los tres puntos en un comienzo fulgurante con tanto de Forsberg en la primera ofensiva, pero terminó sufriendo lo indecible para ratificar sus tres puntos. Repitió el del RB Leipzig en la segunda mitad para doblar incluso las distancias, pero la remontada polaca emprendió el camino y se quedó en la orilla pese al empeño de Robert Lewandowski. Evadiendo la presión del Eslovaquia - España simultáneo, Forsberg cumplió con creces con las expectativas suecas de inicio con un tanto antes incluso de que se acomodaran los espectadores. Sin nada que perder, ambos conjuntos firmaron su partido más vistoso en esta Eurocopa. En un intercambio constante de tentativas, la cabeza de Lewandowski rozó el empate por partida doble que en ese momento hubiera metido ya además a España a la cabeza grupal. Incomprensiblemente, el «9» falló como no suele acostumbrar y aplazó el sueño de remontada polaco. Un nuevo golpe para Polonia llegó tras la reanudación. Con el equipo volcado hacia el área de Olssen, un contraataque trenzado a la perfección encontró en las botas de Forsberg un definidor nato que no perdonó el 2-0. Con pie y medio fuera, la rebelión polaca encontró en la figura de Lewandowski su máximo argumento para creer. Un latigazo a la escuadra del último Bota de Oro puso de nuevo el empate a tiro y el gol que agitaba la cabeza grupal acabó llegando, aunque en un fuera de juego por centímetros que chafó cualquier festejo. A base de insistencia, el 2-2 cayó por su propio peso de nuevo por obra de Lewandowski y Suecia, justo antes de ceder su trono, tomó la palabra en el tiempo de descuento para firmar el definitivo 3-2. Claesson mantuvo el privilegio amarillo. El Suecia - Polonia en las redes sociales