Casado ante el espejo
¿Hasta dónde está dispuesto a dejarse arrastrar el PP? La próxima vez que Casado vuelva a Bruselas tendrá que explicar si votó en contra o se puso de perfil ante un discurso que nos devuelve a la peor memoria del siglo XX en suelo europeo
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Pepa Bueno / Cadena SER
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Madrid
La extrema derecha ha utilizado hoy el Congreso de los Diputados y una moción de censura condenada al fracaso para volver dejar claro quienes son: un cóctel con recetas añejas de los ultras españoles de toda la vida, más un corta y pega de lemas vacíos del nuevo trumpismo mundial. Reivindicación del franquismo y negacionismo climático, feminista, contra los inmigrantes... a lo que hay que añadir la demagogia económica que defiende, de palabra, a los empobrecidos pero con medidas que protegen a los ricos. Eso, y los golpes de efecto para apropiarse de las víctimas de ETA, de la nación española y de la Constitución que sus antecesores políticos boicotearon. Nada nuevo, en su España solo caben ellos.
Aquí la cuestión sigue siendo el PP. ¿Hasta dónde está dispuesto a dejarse arrastrar por este delirio? Mañana Pablo Casado tiene mucho más que una réplica. Toda Europa ha visto hoy a un Parlamento secuestrado dialécticamente por la extrema derecha. La misma a la que aíslan en Francia o en Alemania. La próxima vez que Casado vuelva a Bruselas tendrá que explicar si votó en contra o se puso de perfil ante un discurso que nos devuelve a la peor memoria del siglo XX en suelo europeo.