Málaga, el festival con mascarilla que quiere revitalizar el cine español post COVID-19
El certamen de cine en español arranca este viernes, tras ser suspendido por el coronavirus, en un momento incierto para la industria española y rodeado de medidas de seguridad para evitar contagios

Fachada del Teatro Cervantes de Málaga que acoge a partir de mañana viernes el vigésimo tercer Festival de Cine en Español después de ser aplazado en marzo por coronavirus y que acapara todas las miradas de la industria cinematográfica al convertirse en el primer gran encuentro del sector tras el confinamiento / Jorge Zapata (EFE)

Tras la suspensión del Festival de Málaga, hace cinco meses, el certamen vuelve a resurgir este viernes de agosto, para poner algo de normalidad a un sector, el del cine, que trata tímidamente de salir adelante después del parón provocado por el COVID-19. XXXXX decía José Antonio Vigar, director del festival en el programa La Ventana, de la Cadena SER.
Málaga es el festival de cine en español que, cada primavera, aupaba las producciones españolas para la segunda mitad del año. De su sección oficial han salido óperas primas de cineastas imprescindibles ya en nuestro el cine. Es el caso de Verano 1993, de Carla Simón, que ganó la Biznaga, o de Carmina y Amén, de Paco León, o 10.000 Kilómetros, de Carlos Marqués Marcet. Pero además, es un buen descubridor de títulos latinoamericanos, como Las niñas bien, de la mexicana Alejandra Márquez Abella, Capitán Kóblic, del argentino Sebastián Borensztein.
De ahí la importancia del certamen para una industria que trata de trazar lazos con el cine de los países de América Latina. Este año el festival se celebra a medio gas. No habrá alfombra roja, uno de los momentos de unión entre los malagueños y el festival, y hay cuatro películas menos en sección oficial. No habrá fiestas y los pases y las ruedas de prensa se llevarán a cabo con distancia social, mascarillas y más medidas de higiene.
Muchas de las películas que iban a estrenarse en la edición de marzo del festival, ya se han ido estrenando en plataformas en este tiempo. Otras se mantienen, como La boda de Rosa, de Icíar Bollaín, que será la inauguración del certamen este viernes, con Candela Peña como gran protagonista y primera candidata para la Biznaga a mejor actriz. Otra de las películas que aguante es Las niñas, la ópera prima de Pilar Palomero, que pasó por la Berlinale, y que cuenta el despertar sexual de un grupo de niñas en un colegio católico en la España de antes de las Olimpiadas.
También compiten en sección oficial directores veteranos, como Achero Mañas presenta su nuevo trabajo, tras diez años alejado del cine. Un mundo normal, es una road movie con Ernesto Alterio y Magüi Mira. O Daniel Calparsoro con el thriller Hasta el cielo, que arranca en la Fabrik, la famosa discoteca, y que cuenta con Luis Tosar y Miguel Herranz, en el reparto. David Trueba llegará en la recta final del certamen con A este lado del mundo, ambientada en Melilla y que aborda el tema de la inmigración. También en los últimos días de certamen se proyectará Los Europeos, la película de Víctor García León sobre la novela de Azcona, que cuenta con Juan Diego Botto y Raúl Arévalo.
Aunque la programación se ha reducido en este festival adaptado a la nueva realidad, la sección de documentales sigue un año más. Por ella pasará Jordi Évole con la cinta inédita que rodó en casa de Pau Donés, el músico de Jarabe de Palo, que murió de cáncer en plena pandemia. También Cartas mojadas, documental de Paula Palacios sobre el trabajo de Open Arms, la ONG que lidera Óscar Camps, que será uno de los invitados del festival. Chus Gutiérrez estrena Rol & Rol, un documental que muestra cuál es el retrato de las mujeres en los medios de comunicación.
Málaga será el primer festival español que se celebra después de la crisis sanitaria. Su puesta en marcha será, sin duda, un punto de inflexión en lo que ocurra en la nueva temporada para la industria del cine. Una industria afectada por el parón y encarecimiento de los rodajes, por el retraso de estrenos y por la falta de asistencia al cine, después de meses de confinamiento. Sin duda, un inicio de toda una carrera de obstáculos a los que el cine español se enfrentará, al menos, hasta que haya vacuna.

Pepa Blanes
Es jefa de Cultura de la Cadena SER. Licenciada en Periodismo por la UCM y Máster en Análisis Sociocultural...