Ana Fernández, actriz: "En una película de terror hay que jugar mucho más con la imaginación"
Los actores Ramón Barea y Ana Fernández presentan 'Voces', una película de terror que se estrenará el viernes 24 de julio
. / Película: 'Voces'
Madrid
De las pocas películas que, por desgracia, se van a estrenar este verano, esta semana llega a la cartelera ‘Voces’, un filme de terror dirigido por Ángel Gómez. En la película, Rodolfo Sancho y Belén Fabra son un matrimonio que se mudan a una casa deshabitada desde hace años. Su hijo pequeño comienza a escuchar extrañas voces que intentan comunicarse con él, pero los padres en un principio creen que son fruto de su imaginación. Tras una serie de sucesos paranormales que afectan a la familia, el padre decide pedir ayuda a Germán, un experto en psicofonías interpretado por Ramón Barea. Él y su hija Ruth, una técnico de sonido muy escéptica con el mundo sobrenatural, encarnada por Ana Fernández, le ayudarán a descubrir si existen esas voces y qué es lo que quieren. En ‘La Ventana’ hemos invitado a Ramón Barea y Ana Fernández, padre e hija en la película, para hablar del estreno de ‘Voces’.
Ambos actores han hecho un esfuerzo en la interpretación de sus personajes. Por ejemplo, Guzmán, el personaje de Ramón Barea, cree que hay cuestiones inexplicables que pertenecen a un mundo subterráneo, pero en la vida real el actor no cree en absoluto en los fenómenos paranormales. Sin embargo, Ana Fernández, al contrario que su personaje Ruth, nos ha contado que sí cree en las energías y psicofonías.
Ramón Barea: "Da miedo la capacidad del cine para producirte emociones"
08:57
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“En esta película he vuelto a ver la magia del cine”, dice Ramón, a la vez que confiesa que como espectador, cuando vio las imágenes le daba miedo lo que habían rodado. “Es la capacidad del cine lo que da miedo, esa capacidad para producirte emociones”, sostiene el actor.
A la hora de rodar la película, Ana y Ramón cuentan que fue todo un reto porque para los dos actores se trataba de su primer filme de terror. “Yo soy muy fan del terror como espectadora y me lo pasé genial haciendo la película”, dice Ana. Por su parte Ramón se sorprendió a sí mismo teniendo miedo mientras leía el guion de la película; “tenemos incubado esa capacidad por sentir miedo por cosas, aunque sepamos de qué tratan”.
Durante el rodaje de una película de miedo los actores tienen que hacer un gran ejercicio de imaginación. “Hay muchos ruidos, sustos o crujidos de madera que vienen después en posproducción, por lo que cuando rodábamos teníamos que ser muy niños y jugar con nuestra imaginación”, cuenta la actriz.
