Las insidias de Casado
Debería tener cuidado el por ahora mandamás del PP porque está a punto de convertirse en un loco con embudo en la cabeza, arrastrado al disparate por sus asesores de la caverna
Madrid
Cosas que dan risa. Los manuales de guerrilla urbana que los manifestantes rojigualdas -qué tendrá que ver la bandera con la COVID19- manejan como si fueran los anarquistas de Barcelona o los neonazis de Alemania. ¡Hay que ver cómo se nos han asilvestrado en unos días señoras y señores tan distinguidos!
O bien oír decir a García Egea, el de los huesos de aceituna, que Sánchez odia a Madrid. ¿Se puede declarar cosa tan tonta sin ruborizarse?
Pero otras, la verdad, dan bastante asco, como esa repugnante insidia del pimpollo Casado de que el Gobierno compra votos sacando a la calle a presos de ETA. Debería tener cuidado el por ahora mandamás del PP porque está a punto de convertirse en un loco con embudo en la cabeza, arrastrado al disparate por sus asesores de la caverna.
Ah, y está muy bien que un diletante de la política como De Quinto se vaya a su chalé. Allí estará confortable.
Museo: “La ultraizquierda busca pelea y alienta el guerracivilismo en las calles de Madrid”. Pilar Díez, Libertad Digital.
