"Las mamparas provocarán más temor que tranquilidad"
Una de las medidas de seguridad que ha sonado con fuerza para la reapertura de los bares y restaurantes ha sido la instalación de mamparas entre clientes. En algunos países ya se están implantando. ¿Gusta esta medida en nuestro país? Lo hablamos en SER Consumidor con una cocinera y con algunos de nuestros colaboradores
Hostelería: "Las mamparas provocarán más temor que tranquilidad"
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Madrid
A partir del próximo lunes, la hostelería vuelve a abrir sus puertas al público, aunque ya ha habido apertura esta semana en algunas islas. Los clientes podrán volver a tomar algo en su bar favorito. Eso sí, siempre en la terraza y cumpliendo los protocolos de seguridad, por lo que los bares solo podrán tener un aforo del 30% (durante la fase I)
Una de las medidas que más ha sonado para la hostelería en esta vuelta a la “nueva normalidad” han sido las mamparas de separación entre clientes. Un elemento que, parece, no gusta ni a los clientes ni a los propios hosteleros. Aunque la realidad es que en algunos países que llevan la pandemia más avanzada, ya se están viendo restaurantes, como en Bangkok, con todas las mesas con mamparas separando a los clientes, completamente aislados en las mismas meses.
Y por eso nosotros les hemos planteado a tres consumidores ilustres del programa, igual que a una prestigiosa chef, si les gusta la idea, cómo la ven, si irán o no a restaurantes donde se imponga la separación entre comensales.
“Vivimos en España, que es un país en el que a la gente le gusta salir, y contamos con que la gente vuelva a bares y restaurantes. Nosotros tomaremos las medidas de seguridad necesarias, pero lo de las mamparas, como la mayoría de los hosteleros, no lo vemos”, comentó en SER Consumidor Iria Espinosa, copropietaria del restaurante de A Coruña con Estrella Michelin, Árbore da Veira. La cocinera cree que este elemento “provocará más temor que tranquilidad”, y apuesta por otras medidas de desinfección como el ozono.
En el programa también estuvieron algunos de nuestros colaboradores, pero esta vez dejaron un poco de lado su faceta profesional y opinaron más como consumidores.
“Si tuviera que hacer uso de la hostelería, más por obligación que por placer, me gustaría que las medidas de seguridad fuesen máximas. Pero inicialmente, con tantas trabas, tantas pantallas, me costaría volver”, comentó Juan Revenga, dietista-nutricionista.
El economista, Pau Montserrat, tiene ganas de esa vuelta a los bares, “son lugares de encuentro con familiares y amigos”. Y aunque prefiere “espacios abiertos donde puedas interactuar bien” entiende que en estos momentos los locales tengan que apostar por ese “plus de seguridad”.
“Creo que por muchas medidas de seguridad que se implanten, no volveremos a los bares hasta que nos sintamos cómodos”, expuso Miguel Ángel Lurueña, tecnólogo de los alimentos y experto en seguridad alimentaria, a quien tampoco le acaba de convencer la instalación de mamparas en hostelería. “Hablan de mamparas, pero yo creo que esto no gusta ni a los hosteleros”, concluyó.
El propio presidente de Hostelería de España, José luis Yzuel, dijo la pasada semana en SER Consumidor que tampoco le gustaba la idea.