Tentarse la ropa
A la entrevista con Torra se llega con el aviso lanzado, y a la batalla con la oposición se entra con el bazuca por delante, no me den mucho la tabarra que abro la caja de los truenos
Madrid
Buena velocidad de crucero. Promesa pensiones, cumplida. Subida funcionarios, hecha. Y el Gobierno parece que afronta el tema catalán, un problema político, claro, digan lo que digan las derechas y sus cornetas del Apocalipsis, con el mismo ánimo veloz.
Dijo el presidente de pasada en la entrevista de TVE aquello de la reforma del Código Penal para los delitos de sedición, y por si acaso no se entendió cabalmente, ya se encargaron ayer sus terminales de dejar bien clara la cosa. Se marcó el asunto en la próxima agenda del Parlamento y se lanzó el aviso a quien se quería mandar. Lo que obliga a unos y a sus contrarios a tenerlo muy en cuenta.
A la entrevista con Torra se llega con el aviso lanzado, y a la batalla con la oposición se entra con el bazuca por delante, no me den mucho la tabarra que abro la caja de los truenos. Y mientras estas cosas pasan, la brigada Aznar se refuerza para el Armagedón que nos espera. ¡A los refugios, que viene Miguel Ángel Rodríguez!