¿Indiferencia o agotamiento?
La preocupación con los partidos y el temor a la recesión definen el marco español, pero los políticos están en otras cosas
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¿Indiferencia o agotamiento?
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Madrid
El 40% de los votantes del PSOE dicen que confían poco en Pedro Sánchez. El 20% de los de Podemos quieren que el presidente sea Sánchez antes que Iglesias. A Casado casi lo aprueban los votantes de Ciudadanos. Todo eso dice el CIS, que describe cómo, desde 1985, no preocupaban tanto la política y los partidos. A falta de otras exhumaciones, a veces exhumamos años.
Y en descrédito político, el CIS nos deja en niveles del 85, cuando preocupaban tanto las pensiones que a Felipe González le convocaron una huelga general. Sorprende nuestra capacidad para reproducir el calendario: algunas viejas cuestiones siguen bien vigentes. También aquel año se aprobó la ley del aborto y su reforma sigue pendiente de veredicto en algún cajón del Constitucional.
Tezanos explica por qué ahora, de nuevo, el CIS vuelve a tener cocina pero, más allá de la intención de voto, la encuesta da otras pistas. La inquietud de los españoles con la política es un dato clave para prever lo que votará la gente. Ese dato y este otro: crece el miedo a que la economía empeore. Esas dos claves explican nuestro momento, pero ni una cosa ni otra aparece en los discursos.
A días para el 1 de octubre, para que se conozca la sentencia del procés, el Parlament emite nuevos ecos de tensión. Decididamente, sorprende nuestra capacidad para reproducir el calendario casi mes a mes: los octubres se calientan por el procés, los septiembres traen plenos broncos en Cataluña. Tiene lógica esa preocupación ciudadana, si esto por lo que pasamos ya lo hemos pasado antes. Lo que no aclara el CIS es si este desapego de ahora es indiferencia o, directamente, agotamiento.