Adictos a la felicidad
Reducir la vida a la felicidad es perderse algo. Algo jodido pero algo
Reducir la vida a la felicidad es perderse algo. Algo jodido pero algo. El dolor, la pérdida o la tristeza también nos hacen la persona que somos. Me gusta mucho como acaba Faulkner una de sus novelas: "entre el dolor y la nada elijo el dolor". Con la felicidad siempre necesitas un poco más para igualar el efecto anterior. Por eso se llama adicción. Y ser adicto a querer ser feliz tiene que ser muy pesado, especialmente para los demás.
Manuel Jabois
Es de Sanxenxo (Pontevedra) y aprendió el oficio de escribir en el periodismo local gracias a Diario...