Historias entre rejas

Madrid

Si nos pidieran una lista de los derechos que nunca jamás querríamos perder, estoy seguro de que la libertad sería innegociable para un montón de personas. Luego en la práctica es verdad que igual somos todos menos libres de lo que pensamos, porque hay muchas cosas que –seguramente sin que nos demos cuenta- nos influyen, nos dirigen, nos aborregan, en definitiva. Eso es verdad. Pero yo me refiero a la privación absoluta de libertad, a que te encierren, a que cumplas una condena, merecida o inmerecida: con la ley en la mano y en un país democrático, o impuesta por una dictadura.

Hoy traemos a “La ventana” dos ejemplos, dos historias muy distintas. Una de represión, tenebrosa, muy desconocida hasta ahora, que son los campos de concentración de Franco; que los hubo, casi 300, funcionando hasta bien entrada la década de los 40 y por donde pasaron, atención, ¡casi un millón de españoles!

Hoy hablaremos con un periodista que lo ha investigado a fondo y que la próxima semana publica un libro con el resultado de esa investigación. Esta es la historia más turbia, más oscura. La otra es mucho más luminosa, porque es una historia de libertad… entre rejas. Me explico. En la prisión Madrid-1 de mujeres de Alcalá de Henares, y antiguamente en la cárcel de Yeserías, funciona desde hace más de 30 años una compañía de teatro con las propias reclusas como actrices.

Este proyecto ha ganado premios, ha viajado al extranjero y ha adquirido tanta notoriedad que ha acabado saltando a la pantalla. Esta noche se presenta en los Cines Callao el documental titulado “Yeses”, pero ayer hubo pre-estreno en la propia cárcel. Estuvimos allí, creo que será muy interesante compartir con ustedes la experiencia y conversar con los responsables del documental y de la compañía de teatro. Ya verán como al final, en escenarios diferentes, en distintas épocas, por caminos diversos, todo nos conduce a lo mismo: a la búsqueda de la libertad.