Correr para ayudar
Madrid
No recuerdo quién fue el primero en tener la idea, pero organizar carreras con fines solidarios se ha convertido desde hace tiempo en algo más que una moda. Hay carreras prácticamente todas las semanas. Miles de personas que se calzan sus zapatillas y se ponen a hacer kilómetros como si no hubiera mañana.
Da igual quien gane, no importa si uno va muy rápido o muy lento, lo que cuenta es el mensaje; y el valor simbólico del esfuerzo, de perseguir una meta y de hacerlo para ayudar a los demás. A mí me parece que es un fenómeno sociológico digno de ser estudiado, y de cuya potencia podemos presumir como país.
Hoy tenemos una muy, muy especial; vamos a asomarnos a la India, a la región de Annantapur, donde hace apenas unas horas ha finalizado una ultramaratón, ¡de 170 kilómetros!, que servirá ¿saben para qué? Para construir una aldea, que no es poca cosa. La Fundación Vicente Ferrer, que cumple ya 50 años en aquel país, está detrás de la iniciativa. Y en esa carrera ha habido españoles y españolas. Conocer su historia –y la historia de la propia Fundación- me parece una forma magnífica de empezar la tarde.