¿Hay alguien ahí?
El ministro de Fomento, los presidentes autonómicos y los alcaldes, se ponen de perfil mientras una panda de cafres, que espero que no representen al colectivo de taxistas de las dos principales ciudades de España como son Madrid y Barcelona, inmovilizan a un gran número de ciudadanos
Madrid
Los unos por los otros y la casa sin barrer. Es increíble que las administraciones, de la estatal a la municipal, se pasen la patata caliente del conflicto de los taxistas y las VTC. El ministro de Fomento, los presidentes autonómicos y los alcaldes, se ponen de perfil mientras una panda de cafres, que espero que no representen al colectivo de taxistas de las dos principales ciudades de España como son Madrid y Barcelona, inmovilizan a un gran número de ciudadanos y además destrozan todo lo que se les pone por delante. Nadie con mando en plaza parece tener los redaños suficientes para poner coto a una situación de violencia y coacción que hasta el momento goza de impunidad.
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El ministro Ábalos debería coger las riendas como regulador del sector del transporte público y dejarse de excusas para no afrontar su responsabilidad. Los ciudadanos que llevamos varios días padeciendo esta situación empezamos a preguntarnos si hay alguien ahí.