Cobrar por el agua
Madrid
Cuando te sientas en un bar de Nueva York lo primero que te ponen es agua. Gratis. En Madrid, en los años de penuria, los camareros les regalaban el agua a los poetas, que podían estar todo el día delante de un vaso, calentándose gratis en el establecimiento. Y había pintores que vivían, para calentarse si hacía frío, en los museos abiertos. La primera vez que mi madre me llevó a un bar fue para tomar agua. Ella tenía sed, y le dieron gratis de beber. Dar de beber al sediento es un mandamiento. Y ahora en España quieren cobrar el agua en los bares.