El General Piccolomini y el karma instantáneo de la historia
Ir quemado por la vida acostumbra a ser contraproducente. Pero ir quemando tampoco es que solucione mucho, como nos demuestra el protagonista histórico de este 26 de octubre en De Buenas a Primeras
El General Piccolomini y el karma instantáneo de la historia
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El refranero nos dice que “a grandes males, grandes remedios”. Un consejo que nuestro protagonista de hoy siguió a rajatabla… para acto seguido demostrar que los refranes no siempre tienen razón.
El 26 de octubre de 1689, en plena guerra entre Austria y el Imperio Otomano, el general Piccolomini, al frente del ejército austriaco, llegó a las puertas de la ciudad de Skopie, la capital de lo que hoy es la República de Macedonia, y que entonces era parte del territorio controlado por los otomanos. Pero una vez ahí, le llegaron voces de que la ciudad estaba sufriendo una plaga de cólera. Así que el general decidió que, más que ocupar la ciudad, lo mejor sería quemarla entera. Y eso hizo.
Según nos informan las crónicas de la época, Skopie ardió durante dos días enteros. La población pasó de ser de unos 60 mil habitantes a unos 10 mil. El barrio judío, como acostumbraba a pasar, fue el que salió peor parado, con prácticamente todos sus edificios calcinados.
Pero la historia tiene una gran afición a la ironía. Poco tiempo después, Piccolomini murió de cólera y los avances de su ejército quedaron en nada, con las fuerzas otomanas recuperando el territorio perdido.
Así que tómate el día con filosofía, que si te tienes que morir de cólera, vas a morir igual, por muchas ciudades que incineres.
si te has quedado con ganas de más
