Casado se lanza a la yugular de Sánchez

Madrid

Hace nada volvíamos de vacaciones y sobre la mesa nos encontrábamos con la previsión de un otoño caliente, pero pensábamos, sobre todo, en Catalunya. Primero tenía que llegar la Diada, que ya ha pasado con una gran movilización pero sin ninguna tensión, y luego tendrán que llegar los aniversarios del otoño pasado: mañana se cumple un año de las movilizaciones ante la Consejería de Economía de la Generalitat, origen de un proceso judicial que acabó con políticos encarcelados, y luego llegará el aniversario del 1 de octubre.

Estas son las fechas que nos hacían temer un otoño caliente, pero parece que el calor está llegando desde otro sitio, desde el Congreso de los Diputados. Ayer, José María Aznar recordó al nuevo PP cómo era eso de la crispación y el nuevo y diligente PP, encabezado por Pablo Casado se ha puesto manos a la obra. De hecho, ya llevaba algún tiempo practicando. Tomando como argumento principal el haber sido desalojado de Moncloa antidemocráticamente, se ha lanzado a un ataque directo a la yugular de quien lo desalojó. Para ello se sirve de todas las armas, incluida la mentira en los argumentos, hoy mismo lo hace con la polémica sobre el atajo legal que ha tomado el Gobierno de Sánchez para lograr aprobar los presupuestos. El PP dice que es un escándalo, el PP usó este atajo en más de diez ocasiones.

El PP contra el PSOE e intentando robar electores a Ciudadanos en esa lucha que han emprendido los dos partidos. El Gobierno socialista podría aprovecharse de ello si no fuera porque con algunas de las últimas iniciativas presentadas les da todavía más munición, sobre todo si los anuncios denotan cierta improvisación.