Se cumple el guion previsto
Josep Ramoneda reflexiona sobre la condena de Nóos, la acogida a los inmigrantes del Aquarius y la reunión entre Donald Trump y Kim Jong-Un
Barcelona
Pues sí, a pesar de los incrédulos, Iñaki Urdangarín, que “abuso de su situación de privilegio” para cometer delitos, según apunta el Supremo, acabará en la cárcel. El juez Castro, que instruyó el caso, considera “la sentencia benévola”, como ya dijo cuando se pronunció la Audiencia de Palma. Con tardanza, que inevitablemente genera sospechas de favoritismo, se cumple el guion previsto cuando estalló el caso. La infanta quedará libre, pero Urdangarín acabará en prisión aunque no sea por mucho tiempo. Era necesario, se decía, por el bien de la Corona, de la justicia y del país. Que la entrada en la cárcel no se demore mucho más.
Con el gesto de acoger a los inmigrantes del Aquarius, el presidente Sánchez ha dado una señal potente, que busca un cambio de época y se ha propagado por toda Europa. Pero al mismo tiempo ha adquirido un serio compromiso. Después de este gesto su credibilidad dependerá de que realmente sea capaz de cambiar las políticas de inmigración. Y no podrá hacerlo solo. De momento, sin embargo, hay un primer paso que depende exclusivamente del gobierno español: acabar con los incumplimientos del gobierno anterior que ni siquiera respetaba los compromisos adquiridos.
Europa acusa recibo. El presidente Macron, en Consejo de Ministros, ha saludado el coraje de España, ha condenado “el cinismo y la irresponsabilidad del gobierno italiano” y ha recordado que el derecho marítimo establece “que en caso de emergencia sea la costa más próxima la que asuma la responsabilidad de la acogida”. Algo es algo. En España, el PP sigue a piñón fijo con el discurso del miedo: “el mensaje de que España puede ser un coladero es muy peligroso”, dice Maíllo. Pero Feijóo se ofrece a recibir rescatados en Galicia. Todo un indicio.
No tengo palabras ante la imagen de dos matones frente a frente: Donald Trump y Kim Jong-Un. Que esta sea la noticia mundial del día y quizás del mes da la medida del estado del planeta. Trump da a Kim Jong-un un reconocimiento inimaginable. Y los derechos humanos han brillado por su ausencia en el acuerdo. No les interesan.